Una abogada italiana de 59 años fue asesinada en su casa de la localidad bonaerense de Ramos Mejía, donde la maniataron, golpearon y terminaron asfixiándola con un muñeco de peluche en su boca. El crimen de Carmela D’Andraia fue descubierto el jueves y, si bien no descartan ninguna hipótesis, los investigadores orientaron la pesquisa a un posible ajuste de cuentas del narcotráfico, ya que su concubino está detenido desde el año pasado por venta de drogas. El hallazgo se registró en la casa de Alvear 539, donde el cadáver de la mujer tenía signos de haber sido brutalmente golpeado. El cuerpo de la abogada fue descubierto por familiares. En la casa estaba todo revuelto y desordenado. Sin embargo, los familiares determinaron que tras el homicidio de la mujer, el o los asesinos no se llevaron el dinero ni las joyas que la abogada tenía guardados en la habitación de la casa, situada en una zona de clase media-alta. Los médicos legistas descubrieron que por la fuerza con la que introdujeron el peluche, la mujer tenía su dentadura postiza atravesada en la garganta. Uno de los investigadores indicó que la pareja de la víctima fue detenida el año pasado acusado de vender cocaína a consumidores en el garaje de la misma casa donde ocurrió el crimen.