Según el Ministerio de Salud de la Nación, en el país se realizan alrededor de 600 mil abortos inseguros por año, casi un aborto por cada bebé nacido vivo. “Las muertes de mujeres ocurridas después de someterse a abortos también son femicidios”, opinó ayer Fabiana Tuñez, coordinadora general de la Asociación Civil La Casa del Encuentro, quien reclamó al Estado que garantice el libre acceso de las mujeres “a una atención digna en los centros de salud”. Es que la ilegalidad del aborto hace que muchas mujeres queden “expuestas” a riesgos de muerte.

La estadística oficial también señala que 80 mil mujeres son hospitalizadas al año luego de someterse a abortos insalubres. Además, el 25 por ciento de las muertes maternas en el país son por la interrupción voluntaria del embarazo, pero la cifra es mayor si se toman en cuenta los casos no hospitalizados. La discusión legislativa por la legalización del aborto fue pedida este año por varios diputados, que consideraron que es momento de discutirla en el Congreso. En marzo pasado, 33 diputados y diputadas de todos los bloques, excepto el PRO, firmaron la presentación del proyecto de ley de la Campaña Nacional por el derecho al aborto legal, seguro y gratuito.