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–¿Cree que el diseño general del censo estuvo bien hecho?
–Como diseño es muy bueno, quizá es el mejor que tuvimos en el país porque no se tomó una muestra, ese modelo permitía ir a sondear hasta los pequeños segmentos geográficos sin prueba aleatoria. Se preparó muy bien, hasta con seis o siete años de anticipación.
–¿El único problema grave fue la deserción de último momento de los docentes?
–El problema surgió cuando faltaba tan poco tiempo que no permitió ningún tipo de posibilidades de negociarlo.
–En uno de sus artículos, usted explicó algunos de los motivos del diseño, pero no dijo nada sobre la única pregunta que intentaba sondear el desempleo.
–No era una sola pregunta. El censo intentaba saber si la persona trabajó más de dos horas en la última semana. Era una de las cuatro preguntas sobre el tema y son exactamente iguales a las del ’91.
–Lo que se objeta es que hay una hipótesis implícita en esa mención. Basta haber trabajado una hora en la semana de referencia para que se considere a la persona ocupada.
–Es una recomendación de la OIT porque más tarde se le pregunta cuántas horas trabajó. Si hubiesen incorporado a la planilla un límite de horas, como la de 15 horas en una semana que se usa para sondear a los trabajadores remunerados, no podrían captar el subempleo horario.
–¿Pero cómo hacen para saber si una persona trabaja ocho horas o no trabaja más que cada tanto?
–No se sabe.
–¿Y eso fue una debilidad del censo?
–No, en la Argentina no se incluyó nunca. En las condiciones en las que se hace el censo se necesita gente altamente especializada para sondear esos datos. Tiene muchos bemoles el tema de las horas de trabajo y el censo no da para eso. Ese dato se busca en la Encuesta Permanente de Hogares. Pero creo que en el próximo censo se podría probar de preguntar sobre las horas trabajadas aunque sea en más o menos de 15 horas, que es el límite usado con los trabajadores familiares no remunerados, para considerarlos ocupados, tienen que haber trabajado quince horas. Al menos una pregunta del tipo.
–¿El resultado dirá la cantidad de desocupados que supone el país que tiene?
–Va a decir si la persona está ocupada, no dirá si está subocupado. Lo más probable es que dentro de los ocupados haya muchísimos subocupados.