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Más de mil personas se reunieron en el Cementerio de la Recoleta frente el panteón de la familia Duarte para homenajear a Evita en el 50º aniversario de su muerte. Familiares, sindicalistas, diputados, militantes peronistas de vieja data y otros de no tanto se hicieron presentes para recordar hasta las lágrimas a la “abanderada de los humildes”. También en Rosario, el intendente Hermes Binner encabezó un acto en el Monumento Nacional a la Bandera.
Por un momento, parecía que el tiempo hubiera retrocedido. Los micros de los años ‘50 que había llevado el presidente de la Cámara de Diputados bonaerense, Osvaldo Mércuri, decoraban un escenario de época. “Si Evita viviera, la Argentina no estaría como está, no habría gente pidiendo comida en forma masiva, porque eso habría sido ya resuelto por su propio derecho”, arengó el diputado nacional José María Díaz Bancalari.
Además de políticos, muchos integrantes del Sindicato de Peones de Taxis formaron una gran columna liderada por su secretario general, Omar Viviani. También estuvieron el intendente de Tres de Febrero, Hugo Curto, y el diputado Saúl Ubaldini. El encuentro había sido convocado por las 62 Organizaciones y tuvo como único orador al presidente del Partido Justicialista provincial, Manuel Quindimil. La tumba de Evita se llenó de flores que llevó la gente en su recuerdo.
Entre vivas a Perón y a Evita, los asistentes –entre los que había muchos niños– entonaron varias veces la marcha peronista, lo que emocionó hasta el llanto a algunos militantes, sobre todo a los de mayor edad.
Ubaldini consideró que “si Evita viviera sería la misma patrona de nuestra justicia social” y reclamó organizar un proyecto nacional antes que hablar de candidaturas. En tanto, en Rosario, el intendente socialista Hermes Binner participó de la ceremonia realizada en el Monumento a la Bandera, junto a la Comisión Permanente Nacional de Homenaje, donde se guardó un minuto de silencio en memoria de Evita.