Por Fabiana Giovannini *

Son las 6 del 12 de julio. A las 5.30 me despertó una explosión que atribuí a algún grupo de chicos fiesteros. Al rato, siento que abren la puerta de casa y reconocí que era mi hijo Federico quien sube al cuarto y me informa que han tirado un petardo en el pasillo y la puerta de entrada a casa está pintada con aerosol rojo con la leyenda “Zurdos”. Supongo que tiene que ver con mi concurrencia, el viernes a la noche, a la plaza San Martín, de Villa Mercedes, San Luis, durante la represión a los empleados municipales; pero no importa, creo, el hecho fáctico. Esto es la impunidad.

Primero, no es anónimo, la pintada “Zurdos” está firmada por el PJ. En este país cualquier disidente es antes que nada zurdo. Así calificaban los nazis a los judíos, también zurdo es un sinónimo de cualquier cosa distinta, cualquier cosa que atente contra la homogeneidad ambiente, contra la naturalidad de la dominación política vergonzosa en la que vivimos en esta provincia, contra la mínima voz, presencia o existencia que, con su estar ahí, cuestione lo dado, lo establecido, el orden social y político imperante.

En mi mente literaria aparecieron dos recuerdos: la lectura de Herodes, con la matanza de carneros para marcar la puerta de los niños judíos que debían ser sacrificados y las narraciones y escenas de la película La vida es bella donde la policía de Adolf Hitler marcaba con rojo las puertas de las familias judías que, luego, inexorablemente, alimentaban las cámaras de gas de los campos de concentración.

Yo soy una ciudadana de San Luis que, incluso, no milita en ningún partido político, pero sí en muchos actos y hechos donde se reclama libertad y justicia para esta provincia con su Poder Judicial corrompido y degradado hasta el punto que si hoy debo denunciar este hecho el juez de turno será el mismo que ordenó desalojar y reprimir, el viernes pasado a la noche, a los trabajadores municipales, por lo que fui a la plaza y por lo que supongo que marcaron mi puerta.

Escribo “marca en mi puerta” y pienso que no es en mi puerta en realidad: es en mí, en mi vida, es una denuncia del poder PJ que hace 22 años gobierna en la provincia contra una persona que los cuestiona. No tengo miedo. Este mensaje está firmado. Roja se pondrá mi garganta denunciándolos en todos los lugares y medios donde llegue mi voz.

* Fabiana Giovannini es una escribana que vive junto a su hijo adolescente y fue amenazada con una pintada en el frente de su casa en Villa Mercedes, San Luis.