Viernes, 4 de mayo de 2007 | Hoy
CLASIFICADOS
Por Roxana Sandá
¿Qué habrán dicho de este 1º de mayo las profesoras que trabajan ad honorem en la Universidad de Buenos Aires? ¿Hasta cuándo deberán dictar clases fuera del sistema universitario para sostener el currículum? Las últimas cifras dadas a conocer registran un panorama desalentador: para la Secretaría de Hacienda de la UBA, 19.951 docentes de las y los 38.000 que integran la planta total no cobran por sus tareas. Y un censo acordado entre el Ministerio de Educación, sindicatos docentes y el Consejo Interuniversitario Nacional reveló —según precisa un informe del sitio www.empleos.clarin.com— que “sobre una población nacional de entre 130.000 y 140.000 docentes, alrededor de 31.000 trabajarían gratis. Sólo la UBA aporta el 64 por ciento de ad honorem al sistema”. El despropósito alcanza a auxiliares, ayudantes, jefes y jefas de trabajos prácticos, la mayoría con cinco años de antigüedad promedio, que en el mejor de los casos perciben cifras vergonzantes y que en el mundo universitario son llamadas “las rentas precarias”. En la Secretaría de Políticas Universitarias de la cartera educativa dicen estar analizando un cronograma de rentas a pagarse antes de fin de año a docentes con mayor antigüedad y de nombramiento formal. La crisis ya había estallado en 2005, cuando las y los auxiliares elevaron el reclamo de “renta universal” para todos y todas. “En los hechos, quienes trabajamos ad honorem financiamos una universidad que va a la ruina si no se toman medidas de urgencia”, plantearon entonces. Pero el rector y los decanos respondieron que la UBA no podía pagarles, dado que cerca del 95% del presupuesto se destina a sostener los salarios de profesores/as restantes y personal no docente. Además, la categoría ad honorem se mece en una soledad casi de tango, frente a una sociedad que suele fastidiarse ante los reclamos laborales antes que recrearse en una premisa de solidaridad. El sociólogo Atilio Boron da algunas pistas acerca de esa sordera cuando habla de “la cultura del sálvese quien pueda, del individualismo. Es el fin de todas las aspiraciones colectivas. Se creó un modelo cultural ideológico que instaló el individualismo laboral”.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.