Toti Flores y Soledad Bordegaray, del MTD de La Matanza, fueron los anfitriones de Dennis Rodgers durante seis meses de 2003. “El fue el que mejor nos identificó porque no estábamos con partidos políticos, no nos incluíamos en una corriente, nos decían anarquistas.... él nos dijo que éramos iconoclastas y sincréticos. Y le preguntamos ¿qué es sincrético? Es una combinación entre pragmatismo e idealismo. ‘Ah, eso somos...’”, cuenta Flores entre risas. Rodgers escribió un capítulo del libro Cuando con otros somos nosotros, próximo a aparecer, editado por la Imprenta Chilavert (uno de los emprendimientos del movimiento). El capítulo se llama “Son como esponja”. “Toman todo, aprietan, dejan de lado lo que no les interesa y guardan”, explica Rodgers.

El MTD es uno de los movimientos piqueteros más viejos, nacido en 1995. Hoy son 50 compañeros que forman una cooperativa. Hace poco tuvo mucha difusión el emprendimiento textil por el cual se asociaron con el diseñador Martín Churba y exportaron guardapolvos a Japón. “Ahora estamos cerrando un acuerdo con la cadena de Comercio Justo de Italia y vamos a exportar 110 mil remeras. Y es muy interesante porque es una cadena de valor en la que no hay explotación.”