Primero fueron los figurines Lego, luego el embucha-fantasmas Pac Man, en breve será Hello Kitty y, como si no fuera castigo suficiente tener a tan sosos personajes estelarizando películas, medios yanquis anuncian que ya está en tratativas la producción de un film animado donde los protagonistas serán... los emojis. Sí, los emojis. El mundo, en efecto, se ha vuelto un sitio un poco peor gracias al reciente anuncio de la web de noticias Deadline que, en exclusiva, advierte cómo, tras una ferviente pulseada con otros dos estudios, Sony Pictures Animation cerró un acuerdo de siete cifras para lanzar un largometraje centrado en los reyes de la comunicación no-verbal. Así, los famosos emoticones –que, tras ser creados en Japón, han invadido al mundo digital con sus ideogramas y caritas sonrientes (o tristes, enfurecidas, guiña-ojos, irónicas, etcétera, etcétera, etcétera)– pronto tendrán una historia, y dejarán de habitar exclusivamente mensajes de redes sociales, donde tan bien han sabido reemplazar adverbios y adjetivos. Empobreciendo, según muchos, la tan rica lengua castellana.

Por lo demás, el guión (sí, claro, habrá guión) será coescrito por Eric Siegel y Anthony Leondis, que también se hará cargo de la dirección –como lo hiciera con el largo animado Igor en 2008–. Se lo merece: después de todo, él fue el culpable de presentar la idea y los storyboards que conquistaron a los jefes de estudio. En resumen: los simbolitos debutarán en pantalla grande para alegría de.... bueno, de alguien. Después de todo, si Sony ha apostado tamaña millonada, habrá cierto público (¿adolescente?, ¿infantil?) testeado. Pobres Warner Bros y Paramount, los perdedores de la contienda; tendrán que rastrear inspiraciones varias en otros bichos sin sustancia, mayor interés o, para el caso, base argumental.