Domingo, 12 de noviembre de 2006 | Hoy
VALE DECIR
Se supone que el euro es una de las monedas más confiables de la Tierra, pero si la plata va y viene, el euro tiende a irse para no volver. En pocas palabras: los papeles de curso legal se deshacen literalmente en las manos. El primer billete “deshecho” fue uno de 20 morlacos, reportado por un banco estatal en Berlín el pasado 21 de junio. Desde entonces, el hecho se repitió en 17 ciudades. La alarma sonó fuerte en todo el continente, y las autoridades de los bancos centrales europeos ya están investigando el caso del dinero que parece desaparecer sin explicación. De acuerdo a la revista Bild, químicos expertos creen que “los billetes destruidos entraron con contacto con ácido sulfúrico”. Y que al entrar –más tarde– en contacto con la transpiración humana, se desató una reacción que convierte a las sales sulfúricas en una sustancia más corrosiva. La autenticidad de los billetes ha sido probada –corroboración de números de serie, etcétera: todo está en su lugar–, y ya se contempla la pavorosa hipótesis de un saboteador que pudiera habérselas ingeniado para ingresar en la imprenta con el objetivo de demostrarle al mundo que el euro no es indestructible. Pero hasta ahora, nadie se lo ha adjudicado como atentado. La misión tiene a los investigadores rascándose la cabeza, absolutamente perplejos. Quizá, si quieren estudiar los mejores trucos para hacer que el dinero se esfume, en una de ésas deberían mandar a algunos de sus investigadores a darse una vuelta por acá.
En el estado brasileño de Minas Gerais parece que no se venden únicamente hectáreas descampadas, casas o edificios. En octubre, la Compañía Energética Minas Gerais publicó en su site (www.cemig.com.br/noticias/index396.asp) un anuncio con fotos de una pequeña localidad que en algún momento alojó a 120 trabajadores de una represa. La ciudad, de sólo 35 años de antigüedad, tiene 70 casas, un hotel de 22 habitaciones, un supermercado, una plaza y una escuela, pero sólo un habitante que cuida el lugar hasta que se encuentre comprador. Por la módica suma de 2,2 millones de euros, la localidad ya tiene varios interesados desde Alemania, Estados Unidos y Canadá.
China no se encuentra fuera de la obsesión mundial por el aspecto físico. Cada vez son más quienes se practican intervenciones quirúrgicas para alargar las piernas por razones estéticas. Es por eso que el gobierno decidió prohibirlas y sólo permitirlas en casos específicos que estén justificados por determinadas patologías. El alargamiento de piernas es una dolorosa técnica que implica partir las piernas del paciente y estirarlas mediante un potro. Estas operaciones, que tienen un costo de entre 11.700 y 19.600 euros por intervención, son muy populares entre la juventud china. Al parecer, se trata de una obsesión muy extendida e incluso a la hora de conseguir empleados, muchos empresarios solicitan una altura mínima de 1,65 para las mujeres y 1,70 para los hombres.
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.