“Si estás buscando el amor, y estás muerto, Ghost Singles es la página perfecta para vos”, anuncia el sitio de citas más inesperado que ronda la web, donde el único requisito para participar y encontrar la media naranja es que al interesado no le corra sangre por las venas. Ojo, hay restricciones: “No aceptamos muertos vivos; ni zombis ni vampiros”, explicita el manifiesto de condiciones de un servicio especialmente diseñado para fantasmas solitarios.

Gratuito y de fácil acceso, la función de búsqueda permite elegir candidatos que han muerto, a saber: “Horriblemente, misteriosamente, trágicamente o de repente”. Aunque, para afinar la selección y habilitar que las flechas del Cupido de ultratumba atinen certeramente, el participante debe proveer cierta información personal (lo básico: año de fallecimiento, estatus marital previo, a cuántos metros sobrevuela y condición “física”, es decir, si es un fantasma etéreo, humeante, nublado, etc.).

Al participar, avisa Ghost Singles, hay que atenerse a potenciales inconvenientes, como “ser tomado menos seriamente por los vivos porque vieron su foto online” o “ser acosados y/o capturados por los Cazafantasmas”. A Phantom4u, uno de los usuarios, las condiciones parecieron cerrarle y se sumó a la intentona con la siguiente descripción personal: “Estoy muerto desde 1902 y ¡estoy tan aburrido! Sólo quiero salir y divertirme y ver qué más pasa. No estoy buscando nada serio”. Una advertencia del más allá, entre aullidos (de amor) distantes. ¡A persignarse!