All You Can Feel —en castellano, Todo lo que puedes sentir— es el nombre con el que la artista berlinesa Sarah Schönfeld bautizó su más reciente proyecto visual, con el que ha intentado descifrar si las drogas psicotrópicas lucen de manera similar a como se sienten (post-ingesta, claro). Para responder tamaña intriga, la fotógrafa derramó gotas de distintas sustancias (éxtasis, heroína, ketamina, LSD, opio, MDMA, entre ellas) sobre un negativo que ya había sido expuesto y esperó a ver cuáles eran las alteraciones de forma-color que aparecían sobre el recubrimiento fílmico. Luego procedió a retratar lo que el mecanismo —sencillo y, a la vez, efectivo— mostraba. El resultado, de sueños: esporas turquesa, cristales, picos de cuarzo, entre otros, pueden verse bajo la experimental mirada de Sarah y un trabajo que equipara las reacciones químicas del material con las corporales, físicas. Amén de una obra que se revela adictiva en sí misma.