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David Bowie: No espero que la humanidad progrese en demasiadas áreas; sin embargo, cuando un hijo tiene otitis, uno se siente agradecido a la ciencia por los antibióticos.

George Foreman: Todos mis hijos se llaman George Foreman. Todos saben de dónde vienen.

Eminem: Mi hija Hailie tiene doce años y todavía cree que levantar el dedo medio para hacer fuck you está mal. Creo que lo estoy haciendo bastante bien como padre, teniendo en cuenta que debo compatibilizar los temas de mis canciones con criar a dos nenas.

Woody Harrelson: Recuerdo cuando llegó mi hija Deni y era tan pura y amaba todo y a todos. Y de alguna manera este pequeño ser se las arregló para atravesar todos los obstáculos –las torres, los muros– que había construido alrededor de mi corazón. En ese momento, mi corazón la necesitaba.

Ted Kennedy: Mi padre solía decir: “Hacé lo mejor que puedas y después al carajo”. Siempre se fijaba más en el esfuerzo que en los resultados.

Snoop Dogg: Hay que entrenar diferente a cada chico. Mi hijo más pequeño, Cordell, me ama como un fan ama a Snoop Dogg. Le gusta hacerme feliz. Mi hijo más grande, Corde, alias Spank, hace todo lo que le digo con esfuerzo y determinación, pero lo hace para él. Se excita viendo sus propios resultados en un campo de fútbol. Va a ser capaz de jugar para el colegio que elija.

Peter Boyle: Cuando me iba a convertir en padre, mi amigo Burguess Meredith me dijo: “Vas a encontrar algo maravilloso: alguien a quien amas mucho más que a ti mismo”. Para personas egocéntricas, es una bendición.

George Martin: Hay algo de mi padre en mí, y hay algo de mí en mi hijo. Es enloquecedor ver a tus propios hijos repetir las estupideces que uno hizo cuando era joven. “Dios, ¿por qué no aprende?” Pero, después de todo, ¿por qué no aprendí yo?

Mijail Gorbachov: Yo era solamente un niño. Mi padre se iba a pelear en la Segunda Guerra Mundial. Todos lo estábamos despidiendo. Fue muy emotivo. Todos estaban llorando. Justo antes de irse, mi padre me compró un helado. Venía en una taza de aluminio. Todavía recuerdo el gusto de ese helado.

Dick Van Dyke: Todos llamaban “Cookie” a mi padre. Nadie sabía su nombre verdadero. Hay una foto mía cuando era niño en un parque, para el picnic del 4 de julio. La mesa estaba puesta para la ensalada de papas y de repente empezó a llover torrencialmente. Todo el mundo salió corriendo al auto –salvo mi papá–. Se sentó ahí y comió bajo la lluvia, chorreando, solo por el placer de hacerlo.

James Caan: Nunca vi llorar a mi padre. Mi hijo me ha visto llorar. Mi padre nunca me dijo que me amaba y en consecuencia yo le digo a Scott que lo amo cada minuto. El punto es que voy a cometer menos errores que mi padre, mis hijos con suerte cometerán menos errores que yo y sus hijos cometerán menos errores que sus padres. Y uno de estos días criaremos al perfecto Caan.

Philip Glass: Cuando uno se convierte en padre, empieza a comprender a los propios padres. Empieza a entender cuánto les debe y lo mucho que está delineado por su forma de ver el mundo.

Forest Whitaker: La otra noche estaba bajando las escaleras detrás de una de mis hijas. Yo estaba cansado y ella estaba jugando como juegan los chicos, haciendo pavadas en la escalera. Y yo pensaba, por favor bajá los escalones y dejame meterte en la cama. Tu hora de dormir se pasó. Hoy tuve suficiente por un día. Y de repente me rescaté. Me desperté. Me dije, “Ey, basta de quejas, ¡tendrías que bajar bailando las escaleras con ella!”

Peter Fonda: Cuando él murió, yo estaba en la habitación con Jane, su esposo Tom Hayden, la quinta esposa de papá, Shirlee, y estábamos todos juntos y todos estaban siendo bastante mórbidos, salvo yo. Al principio lo estuve mirando, él estaba en otro estado. Y después estuvo consciente. Miró alrededor, cerrando un ojo y después el otro, como un borracho tratando de encontrar el camino adecuado para recorrer. Sus hermosos grandes ojos azules. Después miró a su primogénita, Jane, y después a Hayden. Cuando me miró a mí, abrió los dos ojos. Hizo foco en mí y me dijo: “Hijo, quiero que sepas que te amo mucho”. Así quedaron las cosas entre nosotros.

Estas son algunas de las respuestas sobre la paternidad de algunos de los entrevistados que pasaron por la extraordinaria sección “Lo que sé” de la revista norteamericana Esquire.