Otra joven, de 28 años, murió anteanoche en el hospital de Reconquista, en el norte de la provincia como consecuencia de un aborto. Ana Machuca vivía en el humilde barrio La Cortada y tenía dos hijos pequeños que dependían de ella, ya que estaba separada de su pareja. Según relataron en el hospital, la chica llegó en estado desesperante y sólo llegó a relatar que no quería tener el bebé que estaba gestando desde hace más de un mes y se provocó un aborto ella misma. Eso le provocó la infección, y la paciente ingresó el martes a las 15 al hospital. De inmediato fue intervenida, pero no lograron salvarle la vida. Apenas volvió a terapia intensiva, Ana sufrió un paro cardíaco, y murió de inmediato. Se trata de la tercera mujer que muere en Santa Fe en menos de un mes como consecuencia de abortos clandestinos. De las seis mujeres que fallecieron por esta causa durante 2009, la mitad pertenecen a la provincia.

Según relató la directora del Hospital Central de Reconquista, Liliana Lorenzón, Ana ingresó el martes a las 15, y apenas llegó a contar que se había provocado un aborto. "Fue muy poco lo que pudo contar porque llegó en muy mal estado, lo que sí pudo decir fue que ella se había provocado algunas maniobras hacía una semana. Eso es lo que me informaron las enfermeras de la guardia", relató la profesional, quien subrayó el estado de soledad de la chica. "Llegó acompañada por una vecina, no había ningún familiar, y su estado de salud no dio lugar a más preguntas porque enseguida se descompensó", agregó. Murió alrededor de las 21.

La profesional subrayó que desde hacía mucho tiempo no recibían una mujer con complicaciones de aborto en tal estado de gravedad. "No se pudo hacer nada, era un estado muy avanzado de infección generalizada, no dio tiempo de actuar médicamente, lo que se hicieron fueron las últimas maniobras pero no pudimos revertir el cuadro", indicó Lorenzón.

Por su parte, una histórica militante feminista de Reconquista, la médica Cristina Díaz, también manifestó su desazón por esta muerte evitable. "Acá hubo muchísimos abortos hasta el año 2004, pero la implementación del Programa Nacional de Salud Reproductiva disminuyó la cantidad. Hay altibajos pero en general se nota que el programa, a pesar de todas sus falencias, está funcionando", dijo Díaz. Y sobre todo, subrayó que "hace muchísimos años que no muere una mujer en esa zona del norte provincial como consecuencia de complicaciones de aborto. Es algo inédito prácticamente, porque llegó a la consulta y vivió muy pocas horas".

Díaz es representante en Reconquista de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto. Dijo que en esa ciudad "se trabajó mucho en los temas relacionados a los derechos sexuales y reproductivos, pero la cuestión cultural, las barreras culturales y el tabú, el miedo de hablar de la sexualidad es el obstáculo". Y apuntó: "Esta chica esperó hasta lo último para no consultar por temor a la condena social, a la estigmatización, la humillación, al que dirán".

Por su parte, Marité Yanos, también de la Campaña, pero en Rosario, puso el foco en la despenalización del aborto. "Los responsables son las y los legisladores nacionales, que siguen sin tratar los proyectos, ni debatir este tema que en la sociedad ya se está debatiendo", apuntó la activista, quien subrayó: "Estamos pasmados con estas muertes espantosas, que no son un número, son historias de vida". Y reiteró que "si no se tratan los proyectos y específicamente el de la Campaña, que es integral, los legisladores van a ser cómplices de las muertes por abortos inseguro. No queremos una muerta más por aborto inseguro".