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El informe del Instituto Provincial de Estadística y Censos (Ipec) que marcó algunos números negativos en la economía santafesina despertó la réplica del gremio de las automotrices, puesto que ese rubro quedó descripto como el que sufrió el mayor impacto de la desaceleración.

Marcelo Barros, secretario general de la delegación Rosario del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor (Smata), desmintió ese panorama trazado por el Ipec y aseguró que en el sector -General Motors, en concreto- "todo está bien".

El estudio de coyuntura económica difundido anteayer concluyó en que el retraimiento de las exportaciones de las terminales automotrices significó una merma de 26 puntos de variación interanual. Esta caída fue más intensa que las ventas en el mercado interno del sector, y eso llevó a que el nivel de actividad en los primeros cinco meses del año decayera 9,8% respecto al mismo período de 2011.

Pero Barros replicó: "De los 26 a 27 autos que hoy se producen por hora, se pasará en un mes a 32 unidades, incremento que repercutirá en el retorno de las horas extras" a la planta de General Motors (GM), la principal factoría automotriz que funciona en Santa Fe. El sindicalista admitió: "Es verdad que hoy no hay horas extras, pero en un mes volverán porque se agrandará la producción. Hoy está todo bien y no tenemos ningún indicio de desaceleración en la producción. Las proyecciones para agosto son favorables", enfatizó.