"Central tiene un desafío ambicioso que me gustó. Hay tres objetivos: jugar lindo, ganar y ascender", sintetizó Héctor Bracamonte, el delantero que llegó a Arroyito para suplir los goles de Gonzalo Castillejos. El extrovertido goleador dejó atrás ocho años de participación en el fútbol de Rusia y firmó con los canayas para aportar su "sacrificio". "No soy un dúctil, soy de dar pelea en cada pelota", aclaró el jugador formado en Boca que el año pasado debutó como técnico, sin renunciar a su función de jugador, en el Terek Grozny de Rusia. El ex Instituto Alejandro Gagliardi también se sumó ayer al plantel, mientras que se espera para hoy acordar contratos con Hernán Encina, Jesús Méndez, Franco Peppino y Julio Mozzo. Interesa Diego Lagos, también de reciente paso por Instituto, y quedará para la semana próxima la decisión de Miguel Russo de sumar a Omar Zarif y Javier Toledo.

"No hacía falta pedir referencia de Central y la ciudad. Tengo amigos que jugaron en Ñuls y conozco lo que es Central para el fútbol argentino. Motiva mucho jugar en un club donde la gente necesita el ascenso", consideró Bracamonte. El delantero formado en Boca bajo la sombra de Martín Palermo arregló contrato por un año y su presencia en Arroyo Seco acaparó la atención de todos. "Jugar en Central es un desafío importante y por eso dejé a un lado propuestas de clubes de Primera. Me llamó (Miguel) Russo para ofrecerme venir y no lo dudé", afirmó el delantero de rulos largos y vincha en la frente. "Es una motivación saber que todos los equipos le van a jugar a Central a morir, entonces tenes que estar preparado para solucionar esos problemas", avaluó el goleador que viene de jugar ocho años en Rusia, donde incluso debutó como técnico mientras jugaba en Terek Grozny. "El juego en Rusia es similar al del Nacional B, pero Central es el tercer o cuarto grande del país y eso entusiasma mucho", analizó Bracamonte.

Russo anunció una pretemporada con concentración en Arroyo Seco por dos semanas desde el domingo por la noche. Para el fin de semana el nuevo técnico pretende tener a todos los refuerzos a disposición. Es por eso que hoy se espera sellar la vuelta de Encima, quien se quedó sin contrato en Instituto, como así también la continuidad de Peppino y Mozzo.

Ayer se presentó Gagliardi, quien también se alejó de la gloria cordobesa con el pase en su poder, y se cayó la gestión por sumar Osvaldo Barsottini, por tener el defensor pactada de palabra su pase a Gimnasia y Esgrima.

La dirigencia canaya se ocupará también hoy por la situación de Jesús Méndez, cuyo pase pertenece a Boca, y avanzará en gestiones para lograr las contrataciones de un zaguero central (Russo no quiere a Matías Lequi) y un volante por izquierda.