Pese a que no hubo anuncio formal, la Sociedad del Estado Municipal para el Transporte Urbano de Pasajeros (SEMTUR) acordó de palabra con la Unión Tranviaria Automotor (UTA) pagarle a sus 300 choferes y administrativos el 20 por ciento de incremento salarial que el gremio venía reclamando para completar una suba en los sueldos del 36 por ciento. Fuentes gremiales aseguraron a Rosario/12 que la semana pasada los representantes de la estatal Semtur, que gerencia el 25 por ciento de las líneas que recorren a diario las calles de la ciudad, aceptaron pagar en tres etapas los 354 pesos de mejora en las remuneraciones, tal como habían dispuesto las empresas privadas del sistema. Según pudo saber este diario el municipio financiará el aumento de sueldos con recursos propios y sin promover modificaciones en la tarifa, mientras espera que la Nación aumente los subsidios que gira al interior del país. En ese sentido, el intendente Miguel Lifschitz aún aguarda una respuesta al pedido de audiencia solicitado al presidente Néstor Kirchner para gestionar esos fondos en la Casa Rosada.

El acuerdo salarial entre el gremio que nuclea a los colectiveros y las empresas privadas se firmó el 21 de junio pasado. La única compañía que quedó exenta de tal convenio fue la Semtur. La secretaria de Servicios Públicos, Clara García, explicó en aquella oportunidad que el municipio iba a esperar que se produzcan novedades en el ámbito nacional y además, remarcó, faltaba tiempo para que el aumento de sueldos se concretara.

En efecto, el acta suscripta entre la Cetup y la UTA contemplaba otorgar en tres pagos -el primero de ellos en agosto, al abonarse los sueldos de julio- una suba del 20 por ciento que se suma a la ya entregada en marzo del 16 por ciento, llevando el sueldo inicial del sector a 2400 pesos. De acuerdo al texto rubricado, los empresarios se comprometieron a pagar 154 pesos en julio, 100 en agosto y 100 en septiembre. Quedaron afuera del acuerdo los 300 trabajadores que se desempeñan en las líneas de la Semtur: 113, 116, 120, 121, 122, 123, 160, 133, K y la línea de la Costa.

Desde el mismo día en que el municipio decidió no sumarse al acuerdo, los delegados gremiales de los choferes comenzaron a entablar negociaciones con las autoridades municipales. "El acuerdo está cerca, la municipalidad va a firmar, es cuestión de días. Quieren esperar a ver si la Nación les manda algo de plata, pero no van a proponerle al Concejo un nuevo aumento del boleto, con la suba que hubo en marzo alcanza", repetían los referentes sindicales ante cada consulta de Rosario/12.

Ante una nueva consulta periodística, fuentes gremiales confirmaron que se había acordado de palabra otorgar el aumento salarial. En las negociaciones no participó el histórico jefe de los colectiveros, Manuel Cornejo quien se encuentra en pleno post operatorio. Fueron los delegados de los choferes y la secretaría gremial de la UTA quienes llevaron adelante las negociaciones que llegaron a buen puerto la semana pasada.

En el municipio todavía esperan que desde la Casa Rosada respondan al pedido de audiencia surgido hace un mes, a instancias de un planteo de Lifschitz, cuando los intendentes de las principales ciudades del país se reunieron en Buenos Aires y resolvieron tramitar una reunión urgente con el Presidente para reclamarle más subsidios nacionales para el transporte del interior tendiente a financiar los incrementos salariales de los choferes y evitar una nueva suba del boleto. Allí se acordó que la audiencia debía ser solicitada por el kirchnerista intendente de Florencia Varela, Julio Pereyra.

Por lo bajo, en el Palacio de los Leones admiten que tal posibilidad es cuanto menos efímera tras la embestida reciente de la primera dama, Cristina Fernández de Kirchner contra el socialismo al responder las críticas por el supuesto manejo discrecional de los fondos, los superpoderes y los decretos de necesidad y urgencia.