Los médicos autoconvocados de la Salud pública municipal decidieron ayer en una asamblea profundizar la lucha que mantienen por sus reclamos salariales y laborales. Tras calificar el ofrecimiento del Ejecutivo como "inapropiado, insuficiente y discriminatorio", rechazaron la oferta y resolvieron realizar un nuevo paro. La medida de fuerza, que comenzará el próximo martes, será por 72 horas y solamente se garantizarán las guardias mínimas. Para el secretario de Gobierno, Juan Carlos Zabalza la huelga "es absolutamente fuera de lugar, no es la metodología adecuada sobre todo teniendo en cuenta que los trabajadores de la salud tuvieron entre el año pasado y este una recomposición salarial cercana al 70 por ciento". El funcionario cuestionó a los huelguistas "por poner en riesgo un servicio tan esencial". El propio intendente Miguel Lifschitz garantizó la atención médica en los hospitales públicos que dependen de la municipalidad.

La votación se llevó a cabo en el primer piso de la secretaría de Salud, que se tomó simbólicamente. La delegada de los médicos, Lucía De Vincenti, indicó que rechazaron la propuesta oficial -el cobro de un adicional no remunerativo de 100 pesos, para los que tengan más de 4 años de antigüedad- por "inapropiada, insuficiente y discriminatoria". Los profesionales exigen un salario de bolsillo de 2400 pesos para la carga de 24 horas semanales, y que se implemente de inmediato la carrera sanitaria. Los médicos municipales decidirán además, durante el primer día de huelga, si continuarán con los paros; teniendo en cuenta que al día siguiente está programada una nueva reunión de trabajo con los representantes del gobierno municipal, para tratar de encontrarle una solución a un conflicto que lleva más de un año, y que resiente la atención en los hospitales que dependen del municipio.

La decisión adoptada por los trabajadores de la salud municipal, en el primer piso del Cemar, donde funciona la secretaría de Salud, fue la de endurecer las posturas y llevar adelante un nuevo paro de 72 horas para la semana próxima. Las propuestas oficiales no conformaron en absoluto a los médicos, que llevan un año reclamando por mejoras en el salario.

De Vincenti, manifestó que en la asamblea donde se trató la oferta de las autoridades "había un clima muy efervescente, porque hubo una gran irritación provocada por la propuesta, que fue realmente lamentable".

La delegada precisó entonces que en la asamblea "se resolvió continuar y profundizar las medidas de fuerza con tres días de paro para la semana próxima; martes, miércoles y jueves, con acciones que tiendan a ir preparando, eventualmente, la posibilidad de otra moción que se presentó y se retiró para hacer más adelante, que es el paro por tiempo indeterminado; o bien un paro que abarque una semana, de lunes a viernes".

Según el análisis que describió De Vincenti, la propuesta oficial está muy lejos de lo que vienen reclamando los trabajadores. "El profesional que más recibía de aumento eran 100 pesos, si tenía más de 10 años de antigüedad, y 36 horas de carga semanal, y 17 pesos quienes tenían cuatro años de antigüedad y 24 horas de carga semanal; dejando afuera a los que tienen menos de 4 y más de 10, y además excluyendo a las enfermeras y a las trabajadoras sociales", precisó De Vincenti.

La delegada de los médicos municipales dijo que "además se resolvió continuar con la asamblea en el primer piso del Cemar, para poder subir y exigirles a las autoridades que resuelvan este conflicto. Un conflicto que se resuelve si aceptan propuestas serias en relación con la canasta familiar, que es un reclamo que sostenemos desde hace un año, y ellos han demostrado una incapacidad absoluta para resolverlo".

El anticipo de la futura asamblea, que se llevará a cabo durante el primer día de huelga de la semana que viene, es un claro mensaje para las autoridades de la secretaría de Salud pública municipal, con quienes volverán a reunirse al día siguiente, a partir de las 14, después del fracaso de las gestiones realizadas el pasado miércoles.

La prolongación de la crisis en la salud municipal puso en duda la continuidad de Mónica Fein al frente de la cartera, quien había admitido que su "renuncia está siempre a disposición del intendente".

Ayer, hubo una nueva reunión entre los delegados de los profesionales de la Salud y funcionarios municipales. El secretario de Gobierno, Juan Carlos Zabalza fue el encargado de transmitir el malestar del Departamento Ejecutivo con los trabajadores del sector por la decisión de profundizar el plan de lucha tras rechazar el último ofrecimiento salarial.

"El paro es absolutamente fuera de lugar", dijo el funcioanrio a LT8.

explicitar la posición del Ejecutivo. "Además no es la metodología adecuada -agregó- sobre todo teniendo en cuenta que los trabajadores de la salud tuvieron entre el año pasado y este una recomposición salarial cercana al 70 por ciento". El titular de la cartera política cuestionó a los huelguistas "por poner en riesgo un servicio tan esencial".

Más temprano el intendente Lifschitz había dejado en claro que, aun algo resentida, la atención en los hospitales públicos que dependen del municipio estaba garantizada por el Ejecutivo. El jefe comunal evitó ayer pronunciarse sobre la puja "en torno a posicionamientos" entre los autoconvocados y el Sindicato municipal como había hecho el miércoles.