El juez federal Roberto Angelini se declaró incompetente para intervenir en el desalojo del piquete que se mantiene en avenida Circunvalación y Baigorria. El magistrado resolvió devolver el expediente a la jueza Georgina Depetris, para que continúe con las actuaciones, según confirmó el Subsecretario Legal y Técnico del municipio, Dalmacio Chavarri. El funcionario insistió ante la magistrada con la necesidad liberar urgentemente la circulación. Por su parte el gobernador Jorge Obeid insistió: "Seremos respetuosos de no usar mecanismos de represión policial para resolver un conflicto social, porque se deben resolver con diálogo y persuasión". Ayer en tanto María Esther Fernández, vocera del grupo piquetero, denunció dos graves episodios: "un hombre se bajó con un arma en sus manos y nos apuntó para que lo dejemos pasar con el auto porque su mujer estaba embarazada. Y cerca de 17 una camioneta encaró el corte, y casi nos atropella".

Chavarri explicó que "el juez Angelini se declaró incompetente y devolvió las actuaciones a la jueza Depetris. Luego de este trámite, fuimos con Aldo Gómez (Director de Asuntos Juridicos) a hablar con la magistrada para plantearle que independientemente de los pasos a resolver sobre las competencia de las actuaciones era necesaria una resolución urgente del problema. Ella se comprometió a estudiar el asunto y a tomar alguna decisión" en la mañana de hoy.

Por su parte el intendente Miguel Lifschitz que había tildado a la medida como un "capricho y extorsión de algunos sectores", remarcó que "al ser una ruta de jurisdicción nacional, tienen que actuar las fuerzas de seguridad provinciales y la Justicia federal, como sucedió en otras oportunidades".

Obeid insistió que "no iban a usarse mecanismos de represión policial, sino diálogo y persuasión". "Este es un pequeño grupo de personas que ya no se justifica como un problema social, que llevan adelante una serie de acciones antisociales e impiden la circulación de los rosarinos", dijo Obeid y concluyó evaluando que "para resolver este problema, como hemos resuelto problemas parecidos hace algunos años, necesitamos del apoyo del sistema judicial". El mandatario se mostró particularmente preocupado por el corte en Circunvalación, y afirmó que "llegado el momento" se ordenará un desalojo "no violento".

El gobernador afirmó que le "empieza a preocupar que una arteria vital para ciudad permanezca cortada tanto tiempo y por un grupo tan pequeño" de personas.

"De ninguna manera vamos a usar la fuerza pública para reprimir o para resolver un conflicto social, pero también tenemos que encontrar un equilibrio que permita que el ciudadano que va a trabajar o realiza una actividad cotidiana no la vea interrumpida. Estamos analizando con los jueces la posibilidad de producir un desalojo no violento. Tuvimos experiencias parecidas en otros lugares de la provincia y llegado el momento, por supuesto con participación judicial, se hará", afirmó.