Las FARC dieron hoy un golpe letal a las pretensiones de Francia de asistir y lograr la liberación de Ingrid Betancourt, al asegurar que no era "procedente" la misión médica, a la que consideró "un chantaje", lo que empujó a París a decidir poco después el fin del operativo.

El pronunciamiento de las FARC se conoció seis días después de que un avión con personal médico de Francia arribara a Bogotá, a la espera de una señal para internarse en la selva en busca de Betancourt, secuestrada desde febrero de 2002.

"La misión médica francesa no es procedente y mucho menos cuando no es resultado de la concertación, sino de la mala fe de (el presidente colombiano Alvaro) Uribe ante el gobierno del Elíseo, y una burla desalmada a las expectativas de los familiares de los prisioneros", advirtió la organización.

Por la noche, la Cancillería francesa emitió un comunicado en el que dio cuenta del fin de la misión porque "ya no se justifica" mantenerla, y advirtió que la decisión de la guerrilla constituye "una falta política grave además de una tragedia humanitaria".

El comunicado de las FARC, fechado el viernes 4 "en las montañas de Colombia", publicado por la Agencia Bolivariana de Prensa (ABP) y recogido por Telesur, avisó que la organización no actúa "bajo chantajes ni bajo el impulso de campañas mediáticas". El texto cargó la responsabilidad sobre Uribe, al afirmar que "si a comienzos de año hubiese despejado Pradera y Florida por 45 días", Betancourt, los demás secuestrados y los guerrilleros presos "ya habrían recobrado su libertad, y sería la victoria de todos".

La principal guerrilla colombiana tiene 39 rehenes -entre militares, policías, políticos y tres estadounidenses- que aspira a canjear por unos 500 de sus integrantes presos y dos de sus jefes, Simón Trinidad y Sonia, encarcelados en Estados Unidos.

Las FARC insistieron además en que la liberación de seis dirigentes en enero y febrero último constituyó "un gesto de generosidad y voluntad política" y no a una muestra de "debilidad" como "equivocadamente lo asume el gobierno". "Tales liberaciones obedecieron a una decisión soberana de la insurgencia de las FARC estimulada por la persistente labor humanitaria del presidente de Venezuela, Hugo Chávez, y la senadora Piedad Córdoba", señaló la organización armada.

Reiteraron luego sus cuestionamientos a Uribe porque "quien ordena a sus generales el rescate militar a sangre y fuego, no quiere el canje, y quien ofrece millones de dólares instando a la deserción con prisioneros no está por el intercambio". Para la guerrilla, "Uribe es el obstáculo principal y el enemigo número uno del canje" y por eso apuesta "irresponsablemente, todos los días, al desenlace fatal".

El jefe del Estado colombiano rechazó varias veces el despeje militar y ofertó, en cambio, una zona de encuentro auspiciada por la Iglesia y con observadores de "países amigos", como Francia, España y Suiza. A las publicaciones sobre una eventual acogida de guerrilleros liberados de parte de Francia y otros países, las FARC replicaron que rechazan "la calificación amañada del delito político" y que, por ello, no reclaman "a nadie el estatus de refugiado, utilizado como nombre camuflado del destierro y de la institucionalización del delito de opinión".

Ajeno al pronunciamiento de las FARC, un rato antes el canciller de Francia, Bernard Kouchner, había afirmado que si la organización no respondía a la misión París buscaría "otro camino" para acceder a Betancourt. No pensábamos tener una respuesta en 24 o 48 horas. Vamos a ver, aguardamos, esperamos, animamos las redes. Si no funciona, pasaremos por otro camino", afirmó el jefe de la diplomacia francesa en una rueda de prensa en París, en la que había ratificado que "por ahora la misión se queda allí".

Pero un rato después su propia cartera, "en nombre de Francia, España y Suiza, los países facilitadores de un acuerdo humanitario entre Bogotá y las FARC" anunció el fin de la misión. El texto de Quai d`Orsay -la sede diplomática francesa- señala que los tres países "toman nota" y "lamentan vivamente" la decisión del secretariado de las FARC, que la decisión "sigue intacta" y que permanecerán "plenamente movilizados" a favor de la liberación de Betancourt "y de los rehenes más débiles, así como de una solución humanitaria".