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"Ahora estamos de novios de vuelta", señaló con humor Moyano, al referirse al principio de acuerdo que hubo con los dirigentes sindicales que habían cuestionado su forma de conducción de la CGT.

"Por su supuesto que la CGT siempre estuvo sólida. Lo que pasa es que cuando ocurre algún tipo de desencuentro, empiezan algunas especulaciones en los medios sobre que se rompe o se debilita", afirmó Moyano en declaraciones radiales.

Acotó: "Esto se ha superado. En principio cada uno dijo lo que tenía que decir", al aludir al enfrentamiento con los Gordos. Argumentó que "la figura del dirigente se ve debilitada cuando no tiene el apoyo de los trabajadores, porque allí radica el poder de los dirigentes".

"El otro es el poder mediático. Hace un tiempo no lo llamaba ni 'La Voz del Rioba' (la creación de Juan Carlos Altavista en su personaje 'Minguito Tinguitela') y hoy lo exhiben como el gran estadista de la dirigencia gremial", ironizó Moyano en alusión a Barrionuevo.

Añadió que "ese no es poder, es oportunismo, aprovechar situaciones y pegarla. Esto es lo que les pasa a algunos dirigentes". "El poder lo da el respaldo de los trabajadores, el otro poder es ficticio", enfatizó al referirse nuevamente al titular de los gastronómicos.

Moyano, por otra parte, volvió a negar que el tema interno de la CGT haya sido conversado con la mandataria Cristina Fernández al señalar: "La presidenta tiene temas importantes como para ponerse a ver si (Oscar) Lescano (secretario de Luz y Fuerza) se quiere quedar o se quiere ir".