La presidenta Cristina Fernández de Kirchner tuvo ayer un “episodio de lipotimia”, según un escueto parte de la Unidad Médica Presidencial, por lo que suspendió su actividad oficial, que incluía un viaje a Jujuy para participar del Bicentenario del Exodo. Durante los dos actos que encabezó el martes, la jefa de Estado se había mostrado algo cansada y con la voz apagada. Ayer a la mañana, en la residencia de Olivos, se sintió mal cuando hacía ejercicios en la cinta para caminar. Luego de los controles de rigor, los médicos le diagnosticaron una lipotimia y le ordenaron suspender la agenda de la jornada. Sin embargo, no le prohibieron conceder algunas reuniones, aunque sin moverse de Olivos.