El cruce de cartas que CFK y Rocca mantuvieron entre ayer y hoy intentan aclarar el frente de conflicto abierto tras las críticas al Gobierno que el presidente de Techint habría formulado horas antes de la cena por el Día de la Industria. En una de esas misivas, según la agencia Télam, Rocca aseguró que “una periodista que no logró acceder a la reunión buscó información sobre el contenido de la discusión de uno de los participantes, y lo elaboró a su manera, sin ningún contacto con alguien de nuestra organización”.

Tras leer esta explicación, la Presidenta le expresó: “Me siento en la obligación de comunicarle a usted que daré carácter público a ambas cartas. Las suya y la mía. En la comprensión de que las instituciones sean privadas -como la que usted preside- o públicas, como en mi caso, como así también los más de 40 millones de argentinos, merecen tener acceso a una información veraz y sobre todas las cosas: conocer los `modus operandi´ de cierto monopolio -este sí de carácter ilegal- que aun subsiste en nuestra querida Patria”.

Ayer, el CEO de Techint le escribió a la primera mandataria para informarle cuáles eran las “notas” en las que se había basado el discurso que dio el pasado lunes, escuchado por “15 miembros de la Asociación, sin presencia de otros invitados o periodistas”. Rocca detalló que dijo que “la industria argentina ha crecido desde 1998 hasta hoy a una tas muy elevada, superior a la de cualquier otro país de la región” y que “la capacidad exportadora de la industria nacional se ha también incrementado, y su nivel de apertura hacia el mundo se ha duplicado en el período en cuestión”.

También se basó en notas que decían que “a partir de la crisis mundial del 2008” los indicadores de “competitividad” de la industria Argentina “se han ido deteriorando”. Sin embargo, en un artículo periodístico publicado el 5 de septiembre se señalaba que Rocca dijo que “a partir de 2008 el Gobierno perdió el rumbo”, que “no se sabe para dónde va” y que “la Argentina tiene un gran potencial, pero está muy mal gestionada”, entre otras cosas.

Al referirse a la “competitividad de las exportaciones” el empresario apuntó en su carta que una de sus notas decía que habían sido afectadas por “el incremento del los costos laborales”, mientras que Clarín había publicado que Rocca dijo: “El costo de un obrero industrial en la Argentina es de 24 dólares por hora, contra 12 dólares en México y 9 dólares en Brasil. Eso sí, el operario argentino sigue siendo el más calificado”.

Durante su discurso del jueves, la presidenta respondió a esas interpretaciones. Y hoy, a través de su cuenta de Twitter, la Cristina Kirchner cuestionó esos dichos puestos en boca de Rocca y ratificó el sentido político y económico de su gestión al asegurar que "a la Argentina la vamos a conducir para que todos sigan teniendo las oportunidades que comenzaron a tener desde el 2003".

"Cuando Paolo Rocca presidente de Techint, habla de competitividad, habla exactamente del costo de un obrero industrial", sostuvo y dijo: "Pero la verdad, si el país está tan mal, que pasará en el 2016 y en el 2017 ¿Qué tienen pensado que se van a tornar competitivos?", se preguntó, y continuó "¿Querrán salarios de los trabajadores a un tercio o a la mitad de lo que tienen hoy los trabajadores?".

Ayer, través de un comunicado, AEA defendió ayer “el decidido y sostenido apoyo a las Pymes que integran la cadena de valor del grupo Techint” y destacó “los niveles de productividad y eficiencia que le permiten pagar remuneraciones en los niveles más altos”, palabras más o palabras menos de lo que el diario Clarín le había atribuido a Rocca.