Cabello advirtió que "no se ha escuchado a ningún dirigente desmentir este llamado a paro", realizado desde el exterior mediante las redes sociales. Por eso, el legislador apuntó que "es una minoría que no ha querido entender lo que está ocurriendo en Venezuela y que cree que el 10 de enero es para ellos un 11 de abril", en referencia a aquel alzamiento.

Sin embargo, el titular del Parlamento afirmó que "el 10 de enero no será el escenario que ellos quieren, que es un vacío de poder y cualquier situación que genere lo que ellos adorarían, que sería un golpe de Estado".

"Estamos obligados a prepararnos para dar una respuesta contundente y el pueblo debe estar preparado; ellos quieren salir del comandante Chávez a toda costa, sin ningún tipo de pudor, y no se lo vamos a permitir", subrayó Cabello.

El primer vicepresidente del PSUV reiteró la posición del oficialismo acerca del debate generado por la probable imposibilidad de que Chávez se presente el jueves a jurar su nuevo mandato ante la AN, tal como lo establece la Constitución. Cabello explicó que Chávez está en Cuba con permiso de la AN, tal como lo establece el mismo artículo 235 de la Constitución, y que por lo tanto "cuando regrese, tiene la oportunidad de ir al Tribunal Supremo de Justicia (TSJ), de acuerdo con lo que establece el (artículo) 231".

"Nosotros no podemos dictaminar una falta absoluta o incapacidad definitiva", remarcó Cabello sobre la situación de Chávez, que hoy cumplió el vigésimo octavo día sin aparecer en público desde que el 11 de diciembre fuera operado por cuarta vez en un año y medio debido al cáncer que padece en la zona pélvica.