Además, Timerman sostuvo este "no es un problema entre Uruguay y Argentina, es un problema de la empresa que quiere presionar a los gobiernos, hacerlos pelear, para conseguir un aumento en sus ganancias, sin hacer las inversiones y el cuidado medioambiental al que está obligado". Por eso, el canciller afirmó que "el tema es no aceptar las presiones del grupo finlandés, extranjero, que no es ni uruguayo ni argentino".

Al finalizar la reunión en Cancillería, el gobernador de Entre Ríos manifestó nuevamente su rechazo a un aumento en la producción de la papelera ubicada en la localidad uruguaya de Fray Bentos y ratificó la postura "inflexible" expresada por Timerman. Además, Uribarri indicó que si Uruguay autoriza a la empresa a incrementar la producción "tendremos que acudir nuevamente a la Corte Internacional de La Haya".

El pedido de la firma finlandesa --que congelará la producción de la planta ubicada en las costas uruguayas el próximo sábado por haber alcanzado la producción de toneladas contemplados para este año-- también es rechazado por los asambleístas de Gualeguaychú que retomaron sus manifestaciones y amenazaron con volver a cortar el puente internacional.