Los hermanos habían sido acusados de robar el 3 y 4 de diciembre pasado latas de conserva, palmitos, seis paquetes de yerba mate y tres aceite del supermercado Cordiez ubicado frente a su casa en el barrio San Vicente. Los saqueos se produjeron en varios locales comerciales de la capital en medio de la huelga de la Policía cordobesa.

Se estima que los acusados seguirán detenidos hasta el 10 de agosto, cuando se cumplan 8 meses de arresto, tiempo en el cual tendrán derecho a pedir condicional. Las condenas fueron agravadas como calificadas porque habían intentado coaccionar a una hermana que los denunció ante la policía por los robos. El fiscal de cámara Diego Albornoz dijo a radio Cadena 3 que lo que le llamó la atención es que "son chicos con buena presencia, se expresan bien, son educados, tienen el colegio secundario".

Casi como contracara de este juicio, hoy el fiscal Raúl Garzón autorizó la liberación de los 16 policías que fueron detenidos por el acuartelamiento. Fuentes judiciales señalaron a DyN que si bien el grupo recuperó su libertad seguirá imputado por desobediencia a la autoridad e instigación a cometer delitos, dado que no acataron las órdenes de los superiores para frenar los saqueos entre la noche del 3 y la madrugada del 4 de diciembre, e instaron a otros agentes a plegarse a la huelga.

El abogado defensor de los policías, Leandro Ortiz, confirmó a radio Mitre que hoy "el fiscal Garzón ha resuelto que no hay pruebas suficientes para dictar una medida como la prisión preventiva". Garzón, fiscal del distrito 3, había ordenado la detención de los agentes en enero en el marco de la investigación por la protesta y autoacuartelamiento de los policías que derivó en saqueos generalizados.