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Najim Laachraoui, uno de los kamikazes del aeropuerto de la capital belga, trabajó dos veranos en 2009 y 2010 en el Parlamento Europeo como empleado de una empresa subcontratada encargada de la limpieza del edificio. El hombre, además, fue uno de los artífices de los ataques del 13 de noviembre en París , que provocó 130 muertos.

"Como se exige contractualmente, la empresa de limpieza había proporcionado entonces al Parlamento Europeo la prueba de ausencia de antecedentes criminales del individuo", precisó el Parlamento.

Laachraoui, belga de 24 años, logró llegar a Siria en febrero de 2013 para unirse a las filas de los yihadistas del grupo Estado Islámico. Reapareció el 9 de septiembre de 2015 cuando fue controlado en la frontera austro-húngara, utilizando una falsa identidad, junto a Salah Abdeslam, sospechoso clave de los atentados de París, y Mohamed Belkaid, que murió en un allanamiento en Bruselas el 15 de marzo.

Los investigadores encontraron el ADN de Laachraoui en material explosivo utilizado en la sala de espectáculos Bataclan de París y en el Estadio de Francia, así como en un departamento en Bruselas en donde se confeccionaron cinturones de explosivos utilizados por los kamikazes.

También rentó uno de los pisos en Auvelais (Bélgica) utilizado por el comando que actuó en París. Los investigadores también sospechan que estuvo en contacto telefónico con algunos de los atacantes de París el 13 de noviembre.