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Daniel Álvarez aseguró ante los camaristas haber acompañado al empresario Lázaro Báez a una reunión en la residencia presidencial, en septiembre de 2015, y no haber visto allí al juez Sebastián Casanello. Lo mismo declaró Mariano Cabral, un exsecretario de Cristina Kirchner, quien también compareció como testigo ante la Sala Dos del tribunal de apelaciones.

Ambos fueron interrogados por los camaristas Martín Irurzun y Eduardo Farah, quienes tienen que resolver si confirman o no a Casanello al frente de la causa que investiga lavado de activos por parte de Báez.

El 24 de junio último Báez dijo que "un martes o miércoles" de la segunda quincena de septiembre último, concurrió a Olivos en compañía de Álvarez, y se reunió con la Presidenta. Aseguró que al salir de la oficina presidencial observó la presencia de Casanello y del entonces secretario general de la Presidencia, Eduardo "Wado" de Pedro.

Cabral, secretario privado de Cristina, recordó que Báez fue a la quinta de Olivos a reunirse con la expresidenta y que llegó junto a su secretario Álvarez, quien antes había trabajado para Néstor Kirchner. Sin embargo, dijo que no vio al juez del caso e, incluso, afirmó no recordar haberlo visto nunca en la residencia presidencial mientras él cumplió funciones allí.

Un informe de la Policía Federal sostuvo que en los registros de ingreso de visitantes a Olivos no figura Casanello. A su vez, tanto la ex Presidenta, como Casanello y De Pedro aseguraron que la reunión de la que habló Báez nunca existió.