"Evo Morales fue claro al asegurar que va a atraer inversiones y que la nacionalización que plantea no es de expropiación sino de manejo de los recursos en base a los ingresos que se pueda tener", explicó el titular de la poderosa Cámara de Industria y Comercio (CAINCO) de Santa Cruz, Gabriel Dabdoub.

"Eso nos da una tranquilidad enorme, es una señal que si se cumple estará mostrando una nueva cara de Bolivia a partir del 22 de enero. Hay que darle la oportunidad a ese discurso de Evo Morales, pero seremos vigilantes de que lo que hablamos se cumpla", agregó el empresario santacruceño.

Morales, junto al vicepresidente electo, Alvaro García Linera, se reunió anoche en Santa Cruz con empresarios y dirigentes cívicos de esa región del oriente, sus más férreos opositores no solo durante la campaña electoral sino desde que el líder cocalero se perfiló como dirigente de alcance nacional.

Sin embargo, Morales rompió enseguida el hielo con su promesa de impulsar las autonomías, la mayor demanda que existe en la región. "Hay que reconocer que Santa Cruz llevó la batuta para crear conciencia en el tema de las autonomías", dijo el mandatario electo en declaraciones al diario santacruceño El Mundo.

Asimismo, garantizó la realización de un referendo autonómico, la Asamblea Constituyente que debe reformar a fondo la Constitución, la licitación de un proyecto siderúrgico y aseguró garantía jurídica a las inversiones.

Esto fue ratificado por Dabdoub, quien aseguró a Télam que Morales "planteó la concertación, el acercamiento y la necesidad de que Santa Cruz esté con el programa de desarrollo económico".

"Y para esto -añadió- dio su compromiso de que la autonomía será una prioridad, así como la licitación internacional del yacimiento de hierro Mutún".

Santa Cruz, la región económicamente más poderosa de Bolivia ubicada en el rico oriente petrolero y siempre opositora a Evo y a los reclamos sociales que encabezó, escuchó sin embargo un discurso mucho más agradable a sus oidos por parte del lider del Movimiento al Socialismo.

"No quiero perjudicar a nadie, no quiero expropiar ni confiscar ningún bien. Quiero aprender de los empresarios. Yo no tengo formación profesional pero será importante complementarnos: ustedes tienen la capacidad profesional y yo la conciencia social", les planteó Morales.

Consultado al respecto por Télam, Dabdoub no dudó en afirmar que el presidente electo "tenía una visión errada del Comité Cívico Pro Santa Cruz que representa a todos los sectores sociales e instituciones del departamento".

"Son aproximadamente 200 instituciones y no sólo oligarcas o élites, (Evo) pudo comprobar que también estaban sentados a una misma mesa indígenas, trabajadores, gremialistas y empresarios", sostuvo el titular de CAINCO.

"Evo comprobó que en Santa Cruz hay empresarios que no se pueden menospreciar, sino que hay que incentivarlos para poder crear el desarrollo económico en base a la creación de empleo", agregó.

Del mismo modo, el empresario reveló que Morales se comprometió a que la Constituyente sea por el método representativo de "un voto un ciudadano como pedía Santa Cruz", cambiando su anterior postura de que la misma fuera corporativa, "así como fijar una agenda para saber qué es lo que se quiere cambiar".

Evo Morales comenzó a desarrollar una estrategia en la que el diálogo y la concertación, a diferencia de lo que advertían sus agoreros y adversarios, parece ser la herramienta a utilizar y el equilibrio su principal arma a la hora de tomar decisiones. Algo que los empresarios también le hacen saber.

"Las instituciones seremos celosas a la hora de vigilar que cumpla todo lo que prometió. Apoyaremos todos esos cambios que nos hizo conocer, pero estaremos alertas si algo no está dentro de lo que sea valorar la producción, crear fuentes de trabajo y eliminar la pobreza en base a empleos que sean dignos y sostenibles a largo plazo", advirtió sin medias tintas Dabdoub.

Fuente: Télam-SNI