El XXVI contingente de Cascos Azules aterrizó en helicópteros a las 11.45 en el Sector Militar del Aeroparque Jorge Newberry, donde fue recibido por el jefe de la Fuerza Aérea, brigadier Normando Costantino, otras autoridades militares y familiares.

El grupo, relevado por orden del Estado Mayor Conjunto después de cumplir tareas en Chipre durante el último año, incluyó a los tripulantes del Bell 212 que en julio de 2006 llevó de Beirut a Chipre al primer ministro libanés, Fouad Siniora, a pedido del entonces secretario general de la ONU, Kofi Annan.

El traslado de Siniora, que debía participar de conversaciones de paz en Italia, se concretó durante la invasión de Israel al sur de Líbano, cuando arreciaban los combates entre las tropas israelíes y la milicia de Hezbolá.

El bombardeo del aeropuerto y el puerto de Beirut, así como de gran número de rutas y puentes, impedía en aquellos días otras vías de salida.

Tripularon el helicóptero en esa compleja, riesgosa y reservada misión el vicecomodoro Fernando Simo, el capitán Adrián Longo y el suboficial principal Gustavo Rivarola, quienes hoy regresaron a la Argentina.

Un Bell 212 y dos Hugues 500 de la Fuerza Aérea Argentina son los únicos helicópteros que utiliza la ONU en Chipre, el dividido país insular del Mediterráneo donde cumplieron cerca de 15.000 horas de vuelo desde que fueron desplegados en 1994.

Estas aeronaves tienen base en Nicosia y brindan en la UNFICYP apoyo aéreo en misiones de patrullaje, observación y reconocimiento aéreo, traslado de personal, movimiento de tropas, evacuación médica, búsqueda y salvamento, entre otras.

Vuelan por lo general en la zona desmilitarizada (buffer zone) que por mandato de la ONU separa en la isla a las fuerzas turco-chipriotas de las greco-chipriotas, para evitar choques armados como los que libraron en el pasado.

Fuente: Télam