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"No sé si saldrá este año la ley, pero si Dios me ayuda y puedo ser senador de la Nación, me ocuparé de sacar esta ley", declaró el funcionario ante la prensa tras participar de la 9° Conferencia Nacional sobre Políticas de Drogas.

Fernández insistió con la necesidad de contar con una normativa que no "criminalice" a quien consume sustancias tóxicas "siempre que no cometa delitos" y señaló que "en Argentina hay una parte de gente que consume desde el punto social, otro es abusivo y otro es adicto". "El Estado tiene la responsabilidad de atender la salud de este particular que consume, no de perseguirlo porque consume", recalcó.

Para el ministro, "se trata de una cuestión de derechos humanos" porque "si las libertades son para todos el que toma determinada sustancia tiene derecho en el marco de su libertad y acciones privadas a hacer lo que se le antoje". Reiteró con que "la penalización de la tenencia atenta contra las libertades individuales" y consideró que el tiempo ha demostrado que "este tipo de políticas de persecución de quien consume no es útil, no disuaden y no ayudan, y su resultado es nulo absoluto".

Al hablar ante el auditorio, Fernández ratificó que "la Argentina es un país de tránsito y no de consumo", simplemente porque "el negocio es malo para ellos", los narcotraficantes. "Basta de perseguir a los perejiles", exhortó y pidió que "no hagamos la estupidez de pensar que a la droga se la combate persiguiendo a los pibes que andan con un porro".

Luego, la diputada Victoria Donda (Libres del Sur), quien preside la comisión de Derechos Humanos de la Cámara, expuso su proyecto -uno de los varios que están en tratamiento- y destacó que "la despenalización del consumo para nosotros tiene que ser el piso" de la modificación de la ley y abogó por combatir el problema de origen que dijo que es el narcotráfico.