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La presencia del presidente Mauricio Macri ayer en la Universidad Nacional de Rosario dividió a la comunidad académica. Mientras la mayoría de las autoridades educativas, funcionarios provinciales y municipales, y legisladores de Cambiemos participaron del acto del inicio del ciclo lectivo, realizado en la Facultad de Derecho, hubo manifestaciones de rechazo de organizaciones estudiantiles y docentes, e incluso varios decanos de la UNR prefirieron ausentarse.

Con un fuerte operativo de seguridad en la calle, que incluyó policías y gendarmes, Macri habló en el aula magna de la facultad ante unos 200 invitados. Estuvo acompañado por el gobernador de Santa Fe, Miguel Lifschitz; la intendenta de Rosario, Mónica Fein; el secretario de Políticas Universitarias, Albor Cantard; el rector de la UNR, Héctor Floriani, y, entre otros, el decano anfitrión, Marcelo Vedrovnik.

El Presidente no se refirió a ninguna política o propuesta concreta para el sector universitario (sólo mencionó la necesidad de contar con “un Instituto de Evaluación de la Calidad y Equidad Educativa absolutamente independiente”). Dijo que “los desafíos del siglo XXI pasan por la educación. Esta es la revolución más importante que tenemos que encarar y lo tenemos que hacer reconociendo un frágil punto de partida”. Según dijo Macri, “solo uno de cada diez chicos terminan siendo universitarios y uno de cada cien de los hogares más humildes lo logra”.

Afuera de la facultad, sobre la plaza San Martín, detrás de un vallado, se concentraron organizaciones políticas, sociales y gremiales, en rechazo a la presencia de Macri.

“¿Un hombre que se formó en la universidad privada, que dice no entender por qué hay ‘universidades por todos lados’, que despide de un centro cultural que es modelo en el mundo a personas que llegan desde esas universidades, viene a abrir el ciclo lectivo de una facultad pública y de Derecho? No hay derecho. La universidad pública tiene su razón de ser en la igualdad de oportunidades. ¿Con qué cara se presenta ante ella un presidente que es responsable de 110 mil despidos, que aumenta tarifas de servicios públicos, que apunta contra el Conectar-Igualdad, que tiene en vilo a las escuelas orquesta que buscan, justamente, acercar expresiones culturales a los sectores populares?”, plantearon estudiantes de Nuevo Encuentro, La Cámpora, el Movimiento Evita y otras agrupaciones.

Entre las organizaciones que protestaron ayer se contaron también Patria Grande, el PTS, la JUP, la FOB y la CCC, además de sindicatos enrolados en la CTA. Los docentes del gremio mayoritario en la UNR (Coad) llevaron un pliego de reclamos para Macri: “Reapertura inmediata de las negociaciones paritarias; salario de 18.500 pesos (de bolsillo) para el auxiliar de 1ª exclusiva sin antigüedad; libre ejercicio del derecho a la protesta social”, entre otros puntos.

La visita presidencial a la UNR abrió un debate interno entre las autoridades de la institución. Fue el decano de Derecho, Vedrovnik, quien cursó la invitación a Macri para participar del inicio del ciclo lectivo, pero varios decanos de otras facultades cuestionaron la presencia del Presidente en la universidad. Finalmente, ayer dijeron presente los decanos de Odontología, Bioquímica, Económicas, Ingeniería, Ciencias Agrarias, Arquitectura y Medicina, mientras que se ausentaron los de Ciencias Políticas, Humanidades y Psicología.