CONTRATAPA › LAS PERICIAS CONFIRMARON QUE NOZZI FUE ASESINADO EN EL YATE
Un Gusano que se quedó sin coartada
Tal como adelantó este diario, la versión de Raúl Menocchio, que se había hecho pasar por el secretario del productor cinematográfico, era falsa. Fue detenida la novia del sospechoso.
Por Raúl Kollmann
Las coartadas de Raúl Menocchio terminaron de caerse. El hombre acusado de matar al productor cinematográfico Claudio Nozzi había dicho que éste cruzó al Paraguay para traer a la Argentina diez millones de dólares que se lavarían en el país, y que lo mataron en territorio guaraní para robarle ese dinero. Sin embargo, como adelantó Página/12 en exclusiva, las pericias demolieron esa versión y el reactivo Luminol demostró que a Nozzi lo mataron en un sillón del yate “Trasulag II”. En la embarcación estaban Menocchio, su guardaespaldas, un hermano de éste y una mujer, quienes seguramente serán imputados por el homicidio. Mientras tanto, en un lujoso restaurante de Puerto Madero fue detenida Karina Riveros, quien fuera pareja de Menocchio cuando, en agosto pasado, el Gusano, como le dicen a Menocchio, protagonizó un doble asesinato en Asunción.
El trabajo pericial fue realizado por el prefecto Bruno Koplin, a cargo de la Prefectura en Itatí y un equipo de hombres de la división científica de esa fuerza. Como adelantó este diario, fueron numerosos los indicios de que el crimen no se cometió en Paraguay como decía Menocchio, sino en el yate. La cadena con la que se ató el cuerpo se compró en San Isidro y estaba en la embarcación. El tridente con el que se pretendió que el cadáver no saliera a flote también se encontraba, según testimonios, en el “Trasulag II”. Finalmente, la prueba del Luminol demostró que a Nozzi le dispararon estando sentado en el sillón y, según parece, el cuerpo se guardó durante algunas horas en la sala de máquinas, donde también se detectaron rastros de sangre.
Además del yate, también había vestigios de sangre en el gomón que estaba enganchado al “Trasulag II”, lo que indica que el cuerpo de Nozzi fue bajado del yate al gomón y tirado al río desde allí. Al mismo tiempo, en las dos embarcaciones se encontraron pelos que serían de la víctima. Todos los elementos serán sometidos a análisis de ADN.
Esta semana había declarado ante la jueza Laura Varela un adolescente de 17 años que hizo las veces de cadete. El joven contó que viajó a Posadas en remise con Néstor Ramírez, un hermano del guardaespaldas de Menocchio, y en la capital misionera compraron una hidrolavadora. Con ese aparato intentaron borrar la sangre, pero el Luminol igualmente detecta los rastros, aunque se haya lavado toda la zona. El guardaespaldas, Luis Ramírez, está preso, mientras que su hermano Néstor está prófugo.
El gran misterio que rodea al asesinato de Nozzi es el móvil. Y aquí es donde cae como anillo al dedo la detención de Karina Riveros. En Paraguay, la mujer y el propio Menocchio eran buscados por un sórdido doble asesinato, el de Eduardo Maciel y su novia, Graciela Méndez, allegados a Menocchio, cuyos cuerpos fueron encontrados en sendos tambores de lata, llenos de cemento y tirados en un lago. Menocchio y Riveros fueron acusados por ese doble crimen y ambos estaban prófugos de la justicia paraguaya desde agosto. Sin embargo, hay versiones de que la mujer no huía sólo de la justicia sino también de Menocchio, aunque no está claro por qué. Hay quien dice que ella se quedó con dinero del Gusano y también quien afirma que la mujer, al ser testigo o partícipe del asesinato de Asunción, iba a ser liquidada por Menocchio. Eso lleva a que exista la versión de que no fue detenida por Interpol, sino que se entregó. Y también está la versión opuesta: que Menocchio fue quien dio las pistas para encontrarla y la Prefectura e Interpol lograron entonces ubicarla. Riveros, por su estrecha relación con Menocchio, tiene seguramente la llave para explicar los crímenes de Asunción y el de Nozzi, ya que los investigadores judiciales mencionan una y otra vez el tráfico de drogas y el lavado de dinero, pero lo cierto es que no tienen una sola prueba –salvo que Menocchio era consumidor de cocaína– que demuestre que el origen de los asesinatos está en esos delitos. Lo que está claro es que Menocchio llevaba la voz cantante en la relación con Nozzi, ya que elGusano ocupaba la suite del yate y Nozzi un camarote común, algo inexplicable si se tiene en cuenta que, supuestamente, éste era el dueño del “Trasulag”. Cuando se alojaron en un hotel de Corrientes, también la habitación más cara fue para Menocchio.