CULTURA
La edad no es puro cuento
“La vejez ya no me asusta porque me acostumbré –dice Fogwill–. Pero es una mierda. No me vengan a joder con la sabiduría de los viejos sino con su locura”, dicen.
–Pero algo bueno debería tener... quizá los años le han dado mayor acidez e ironía para mirar el mundo.
–Siempre tuve esa acidez. Cuando mi hija, Vera, que como es actriz siempre cumple 30 (risas), tenía cuatro años, la llevé a jugar a la plaza. Un señor se sentó al lado y me dijo: “¡Qué linda que es su nietita!”. Así que imaginate cómo reaccionarán ahora cuando me ven con mi nena de siete años. Cuando tenía 28 años ya parecía más viejo; me acuerdo que estaba con un ejecutivo de 55 años, que iba a terminar su carrera en cinco años más, y me dijo: “Fogwill, los hombres de nuestra edad...”. Cuando me miro al espejo, de acá para atrás (se lleva la mano a la cabeza), me sigo sintiendo de dieciséis años.