CULTURA › OPINION
La mejor novela sobre dictadores
Por José Pablo Feinmann
Augusto Roa Bastos escribió la mejor novela sobre dictadores. Es un género en el que podríamos incluir la novela de Gabriel García Márquez, El otoño del patriarca, la de Miguel Angel Asturias, el guatemalteco, la de Tomás Eloy Martínez sobre Perón, entre algunas otras. Y creo que el modelo de todas esas buenas novelas es Yo el supremo: todas son un poco deudoras de Augusto Roa Bastos. Es la más destacada porque tiene un estilo que, siendo barroco, no llega a tener el preciosismo de realismo mágico, ese que Europa espera del escritor latinoamericano. De eso, Roa Bastos se salvó.
Personalmente le debo a este paraguayo un cálido recuerdo de mi niñez. El trueno entre las hojas es una novela suya que me permitió descubrir a la lujuriosa Isabel Sarli, cuando ella era muy joven y Armando Bo se preocupaba por hacer denuncia social. A mí nunca me entusiasmó mucho la Sarli, pero a Roa Bastos le debo la emoción de un chico mirando a una verdadera morocha argentina.
Lamento su muerte porque sé que era un buen tipo que se mantuvo hasta el final a favor de causas progresistas, que no siguió el camino de Vargas Llosa, por ejemplo. Suele ocurrir que a la consagración literaria le suceda el giro vertiginoso a la derecha fascista. No fue el caso de Roa Bastos. Lo vamos a extrañar.