El ministro de Justicia y Seguridad, Aníbal Fernández, aseguró que el Gobierno irá “con los tapones de punta” contra los dirigentes que entreguen entradas a los barrabravas y calificó de “positivo” el trabajo de seguridad en los espectáculos deportivos en los casi seis años que está como ministro, al apuntar que sólo dos muertes se produjeron en ese lapso en el marco de la violencia en el fútbol, entre las 187 víctimas de la nómina histórica, en la que no incluyó los casos de Gonzalo Acro, Emmanuel Alvarez y Rodrigo Silvera, al sostener que se trató de “casos criminales”.

Tras firmar el lunes último un convenio con la AFA y 18 clubes de la Capital Federal, donde la Nación tiene jurisdicción en materia de seguridad, para que el Ejecutivo se haga cargo del derecho de admisión en las canchas, el ministro propuso la instalación de molinetes verticales para evitar los ingresos de las barras en malón y también que los clubes garanticen que las localidades “no se vendan en el mismo club”.

De poner en práctica esos dos elementos, el ministro dijo que “sería mucho más simple” identificar al responsable de dar localidades a los barrabravas. “Vamos con los tapones de punta sobre los dirigentes que entregan entradas”, enfatizó el funcionario, y agregó: “Debemos encontrar a aquellos que por temor o porque son más vivos entregan entradas gratuitas para que (los violentos) entren a la cancha”.

El ministro, además, defendió la gestión oficial en materia de seguridad en los espectáculos deportivos al señalar que, en los casi seis años que está a cargo de la seguridad en el Gobierno, ha habido cinco muertos relacionados con el fútbol, “tres de ellos por casos criminales”, en relación a los casos Acro, Alvarez y Silvera, y sólo dos se dieron en el marco de un espectáculo de fútbol, en referencia a los casos de Fernando Blanco, hincha de Defensores muerto en cancha de Huracán, y de Marcelo Cejas, de Tigre, en Chicago. “En otros gobiernos ha habido muchas más muertes porque no han trabajado para que esas muertes innecesarias no existan”, comentó el funcionario, y luego agregó: “Dos muertes reales en el marco de la violencia en el fútbol, de las 187 muertes en el fútbol profesional, es más que positivo, aunque el ideal es cero y para eso tenemos que trabajar”.