Con otro gol salvador de Sebastián Battaglia, Boca salió airoso de su primer amistoso en Grecia, el cuarto partido de su gira por Europa, al derrotar por 1-0 a Aris Salónica. Alfio Basile arrancó el partido con mayoría de suplentes, pero con el correr de los minutos y el partido todavía cerrado, mandó a la cancha a Battaglia, Riquelme, Medel, Palermo, Insúa y Mouche para buscar y asegurar la victoria. El próximo sábado (a las 15) Boca cerrará su gira frente a AEK Atenas.

La primera parte del partido no entregó demasiada emoción, más allá de que la formación alternativa de Boca contaba, por primera vez desde el receso, con el veterano lateral derecho Hugo Ibarra y con el arquero Roberto Abbondanzieri. Lo más emocionante pasaba por las tribunas del estadio Kleanthis Vikelidis, que estaba repleto de hinchas, eufóricos por ver a su equipo frente a Boca.

Quizá por el empujón anímico de sus hinchas, el equipo griego fue el primero en generar peligro. Leandro Gracián, cedido a préstamo por Boca por un año, por cuya cesión se acordó el encuentro amistoso, sorprendió a Abbondanzieri con un remate desde afuera del área, pero el Pato envió al corner; después el arquero le tapó con el cuerpo un remate a Contreras. Para Boca, la primera llegó cerca de los 20 minutos, con un remate de Gaitán que pegó en la cara externa de la red y, diez minutos más tarde, Chávez estrelló un remate desde afuera contra el palo izquierdo del arquero Sifakis, quien sobre el final de la primera parte desvió un remate de Ibarra.

Basile no estaba conforme con el resultado. Y mandó a la cancha a Riquelme, Medel y Battaglia para rearmar al equipo desde el mediocampo. Con ellos, Boca ganó en juego y, para cuando completó con el ingreso de Insúa, Palermo y Mouche, ya era claro dominador del trámite.

De los locales en el segundo tiempo, apenas un remate potente de Contreras que se estrelló en el travesaño. El resto era todo de Boca. Battaglia probó suerte desde afuera pero encontró atento al arquero griego; Sifakis contuvo luego un tiro de esquina de Riquelme que se le metía adentro.

El tanto de Battaglia llegó tras una gran jugada de Insúa, que incluyó un cambio de pie y taco para Palermo, quien abierto sobre la derecha sacó un centro perfecto para que el volante, esta vez de cabeza, conectara para poner a Boca en ventaja.

El final fue previsible. Boca controló la pelota con oficio y el rival no supo cómo hacerle daño. Probó desde afuera con un remate de Flavio que Abbondanzieri controló sin dar rebote. La última para el conjunto de Basile fue un remate de Riquelme que se fue por arriba del travesaño.