Racing le ganó 1 a 0 a Newell’s sin jugar bien, pero festejó los tres puntos como si fueran un campeonato porque salió de la promoción, en un partido de la undécima fecha del torneo Clausura. El único gol del partido, jugado en la cancha de Racing, lo marcó Matías Martínez, a los 77 minutos de juego. Con esta victoria, Racing suma en la tabla de promedios 122 puntos y dejó en zona de promoción a Central y a Gimnasia.

Racing y Newell’s jugaron mal, pero los de Avellaneda tuvieron un poco más de actitud y sólo con eso pueden justificar la victoria. En el primer tiempo los dos equipos salieron a jugar con la misma idea, la de esperar el error del rival y tratar de desbordar por las puntas, pero siempre cuidando primero el cero en el arco propio.

Entonces, los 45 minutos iniciales carecieron de buenas intenciones, de buen juego y durante gran parte de la etapa la pelota pasó más por el aire que por el piso.

En ese contexto, Racing, por ser local, buscó un poco más pero Claudio Bieler y Gabriel Hauche tuvieron poco acompañamiento de los volantes y todo dependió de su capacidad para generar peligro en el área rival.

Así, Bieler tuvo dos chances para abrir el marcador; en la primera dejó parado a Sebastián Peratta, pero la pelota salió apenas desviada, y en la segunda respondió bien el arquero.

Los volantes de Racing nunca acompañaron, Sebastián Rosano por derecha perdió siempre y no ganó ninguna pelota dividida, Claudio Yacob no pesó, a Adrián Lucero le cuesta pasarle la pelota a un compañero y José Luis Fernández sólo aportó sacrificio.

Las subidas de Gabriel Mercado por derecha le dieron algo de presencia ofensiva al equipo de Avellaneda, pero no para justificar ponerse en ventaja.

Frente a este Racing se paró un Newell’s muy cauteloso, con Formica más preocupado en marcar que en jugar, y Achucarro se las arregló solo para complicar al firme fondo del conjunto local. En el primer tiempo los rosarinos tuvieron una chance muy clara que desaprovechó Formica, luego de una contra que se originó en un error de Lucero.

En el segundo tiempo Racing salió con otra actitud, arrinconó a los rosarinos contra su arco pero eso le duró sólo cinco minutos. Después, hasta los 30 minutos no pasó nada relevante, porque ninguno de los dos equipos daba dos pases seguidos y las emociones estuvieron más que ausentes en la cancha de Racing.

Pero a los 32 minutos el juvenil Luis Fariña, quien reemplazó a Lucero, peleó una pelota perdida, la ganó, envió el centro al área y luego de una serie de rebotes la pelota le quedó a Martínez para empujarla al fondo de la red. Con la ventaja, los de Avellaneda buscaron seguir atacando, mientras que Newell’s se quedó sin reacción.