Pablo Lugüercio, uno de los máximos referentes de Racing en la actualidad, alcanzó el sábado pasado su centenar de partidos vistiendo la camiseta celeste y blanca, cuando el conjunto dirigido por Miguel Angel Russo venció 2-1 a Arsenal. El delantero, devenido mediocampista, enfatizó en “el cambio de mentalidad que se produjo en el plantel esta temporada para no pensar más en mantener la categoría, sino en pelear campeonatos”.

–La intención de juego. Racing tiene una idea de juego concreta que busca llevarla a cabo constantemente. Puede que le salga bien, como pasó en varios partidos, especialmente en el comienzo del campeonato, o sufrir una mala racha como también sucedió, pero el plantel sabe perfectamente qué debe hacer para superar a sus rivales. Cuando vine en 2008 me encontré con un club que recién había salvado su permanencia en Primera. Eramos conscientes a lo largo de estos años de que la prioridad era sacar a Racing de ese mal momento. Hoy por suerte ya no pensamos en mantener la categoría, sino en pelear títulos. Y eso se da porque hay una idea de cómo jugar al fútbol, atacando en bloque y sacando provecho de las individualidades.

–Pero dentro de las idas y vueltas en el nivel de todos los equipos, este plantel generó un juego que por momentos resultó vistoso. Nunca nos dejamos llevar por la especulación que se vive en el fútbol argentino. El miedo a perder es total y la realidad marca que hay que ser amarretes a la hora de afrontar los partidos. Nosotros no nos dejamos llevar por esos mandamientos, y en varios encuentros se vio reflejado en la cancha. Lo que padecimos es la falta de contundencia y pagar caro los errores.

–Sin dudas. En los números, la mayoría de los equipos tiene chances de dar la vuelta olímpica; aunque si es por rendimiento, son muchos menos los que están en condiciones. Racing tiene asumido que, pese al plantel reducido, la oportunidad está intacta. Vélez supera a todos los demás, pero tiene que afrontar la doble competencia, y el desgaste mental que significa pelear Copa y campeonato les abre la puerta a todos los equipos. Y en ese sentido veo a Racing un escalón por encima de la mayoría. Lo que necesita para demostrarlo es consistencia.

–Algo más aliviado, especialmente porque la presión que se genera al estar luchando por mantener la categoría es total. Para colmo, en esos momentos ves cómo equipos más humildes se te animan porque saben que estás herido. Los temores que deben estar pasando River e Independiente son lógicos de clubes desacostumbrados a pelear en esas circunstancias. Pero es un error dejarse llevar y considerar que lo mejor es tener un juego austero y sin ambiciones, como a veces se los ve. Es demostrarle al rival que te considerás inferior.

Entrevista: Matías Quercia.