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La aparición en momentos clave de algunos de los buenos jugadores que tiene Independiente –sobre todo durante el primer tiempo– y un golazo de Federico Insúa alcanzaron en la noche santafesina para el primer triunfo de Oscar Ruggeri desde que está en Avellaneda. A su vez, con la derrota en esta decimosexta fecha anticipada, Unión quedó excesivamente complicado en la tabla de los promedios, con serio riesgo de descenso directo. Para el Rojo, el triunfo fue un verdadero alivio –más allá de la lesión de Juan Eluchans–, pero a Unión la caída casi lo condena. Lo negativo para el conjunto rojo fue la preocupante lesión en la rodilla izquierda que sufrió el polifuncional Juan Eluchans. Con este resultado quedó el Rojo con 18 puntos mientras Unión sigue en los 17.
El primer tiempo tuvo dos partes, hasta y después del golazo de Insúa -recibió de Montenegro y se abrió a la derecha eludiendo a dos y al arquero antes de resolver– a los 22. El principio del juego fue de ida y vuelta con oportunidades para los dos. Después del gol se hizo pronunciado el dominio de Independiente, ya que Unión dependía mucho de Christian Giménez. Los de Ruggeri tuvieron dos claras oportunidades más en los pies de Insúa, antes y después del gol.
El segundo fue todo empujar de Unión sin demasiada claridad y replegarse rojo. Sobre la hora un cabezazo de Valli dio en el travesaño. No era para Unión, que igual se fue aplaudido por su gente.