San Lorenzo de Almagro iniciará hoy la defensa del título cuando visite a Olimpo por la primera fecha del torneo Final del fútbol argentino, en el que Boca y River están urgidos por ser campeones para reivindicarse tras un pálido 2013. En poco más de tres meses habrá nuevo campeón.

Con pocas incorporaciones a causa de las dificultades económicas que atraviesa la mayoría de los clubes, con algunos cambios en los bancos de suplentes, con escasas expectativas de que el nivel de fútbol que se juega repunte respecto del pobre ejercicio anterior, el torneo arranca con la urgencia que se renueva cada cuatro años, cuando se aproxima el Mundial.

El campeonato terminará el 18 de mayo, después de que cuatro de las 19 fechas del torneo se disputen entresemana, una aceleración imprescindible para acabar poco menos de un mes antes del arranque de la Copa del Mundo. Serán tres meses frenéticos, especialmente para los cinco equipos del torneo que, además, jugarán la Copa Libertadores.

Ese doble protagonismo que concentrará a equipos auténticamente candidatos, como el campeón San Lorenzo, Newell’s (campeón a comienzos del 2013), Lanús (campeón de la Sudamericana), Vélez o Arsenal (los campeones del 2012), abre de alguna manera el camino a River y Boca, que podrán concentrarse en el torneo local, aunque esa condición podría resultar un arma de doble filo.

La presión será doble, entonces, para los equipos de Ramón Díaz (que hace su debut en el Monumental frente a Gimnasia, con relatos de Sebastián Vignolo y comentarios de Diego Latorre en la transmisión de Fútbol para Todos) y de Carlos Bianchi (que afronta una difícil parada en Rosario ante Newell’s, con la dupla integrada por Mariano Closs y Juan Pablo Varsky protagonizando la transmisión).

El torneo, de paso, decidirá la suerte de los equipos que desciendan al cabo de la temporada. En este momento están en zona de descenso Godoy Cruz (1,168), Argentinos (1,168) y Colón (1,178), tres equipos que estrenan entrenadores (Jorge Almirón, Claudio Borghi y Diego Osella), aunque no pueden descuidarse conjuntos como Olimpo (1,210), All Boys (1,231), Quilmes (1,245), Tigre (1,284) y Rafaela (1,284).

La prohibición de asistencia de hinchas visitantes se mantiene, aunque la norma parece relajada con la figura de los hinchas neutrales, cuyo ingreso tanto conviene a las alicaídas arcas de los clubes. Sólo dos de los veinte clubes de Primera, Lanús y Godoy Cruz, no reconocen pasivo.