Pertenece a una camada de entrenadores jóvenes que aspira a renovar el fútbol argentino con propuestas de juego dinámicas y ofensivas. Esas fueron las ideas que trató de plasmar en San Martín de San Juan y Unión, los equipos en los que trabajó. En base a la rica experiencia que forjó como jugador en el fútbol europeo, Facundo Sava analizó en esta charla con Página/12 las chances que posee la Selección Argentina en la próxima Copa del Mundo que se disputará en Brasil. “El equipo llega bien, con posibilidades y con (Leonel) Messi como la carta de triunfo, pero los compañeros deben ayudarlo, asistirlo. El fútbol es un trabajo colectivo”, apuntó el ex futbolista de Ferro, Gimnasia, Boca, Racing, Arsenal y Quilmes, en el orden local, y Fulham (Inglaterra) y Celta de Vigo (España), en el plano internacional.

–¿Cómo ve la actualidad de la Selección Argentina de cara a la Copa del Mundo?

–Al equipo lo veo bien. Me gusta que tenga vocación ofensiva y que siempre procure tomar la iniciativa de los partidos. Lo bueno es el potencial que tiene de mitad de cancha hacia arriba y la intención de proyectar los laterales. Eso es al menos lo que mostró hasta fin de año; vamos a ver cuál es la actualidad cuando empiece a jugar amistosos de cara al Mundial.

–¿Considera entonces que la defensa es el punto flojo de este equipo?

–No soy partidario de analizar el desempeño de los equipos a partir de dividirlos entre sus líneas. Para mí deben atacar los once y defender los once. Después, si hay problemas cuando nos retrasamos para recuperar la pelota, eso se tiene que corregir con un buen funcionamiento. Y ahí todos los jugadores deben aportar.

–¿Hay que insistir con la línea de cuatro?

–A mí me gusta así. No quiero armarle el sistema táctico a Sabella, pero entiendo que está bien así. No cambiaría en ese aspecto. Además no sé si conviene faltando tan poco.

–Javier Mascherano viene jugando desde hace años en el Barcelona en la posición de marcador central. ¿Debe ocupar esta posición en la Selección Argentina?

–Creo que podría ser muy útil en la defensa. Digo, juega de defensor y está consolidado en uno de los mejores equipos del mundo. Lo aprovecharía ahí, en la zaga defensiva.

–¿Brasil 2014 puede ser a Lionel Messi lo que significó México ’86 para Diego Maradona en términos consagratorios?

–En lo previo pareciera que sí, aunque deberá demostrarlo en el campeonato. Lo bueno es que llegue bien, entero y concentrado. Es el as en la manga que tiene Sabella. Está en una buena edad, maduro y depende de él hacer un buen campeonato. Además, y esto es fundamental, el equipo debe asistirlo como corresponde. Hay que ayudarlo. En este juego, lo colectivo es lo que verdaderamente marca la diferencia.

–Algún entrenador apuntó que Messi había perdido la pasión por jugar. ¿Está de acuerdo?

–No. Lo veo bien. Metido en los partidos que juega en el Barcelona, asistiendo y comprometido con el equipo. Viene de una lesión y está tomando ritmo. Tal vez esté manejando los tiempos de su recuperación para llegar a lo más alto de su nivel cuando la Selección lo necesite, pero esto es una conjetura mía. De todos modos, insisto: para mí nunca dejó de ser el gran jugador que siempre fue.

–¿El arco de la Selección está bien custodiado?

–Sí, (Sergio) Romero es un gran arquero que transmite mucha seguridad y tiene un gran coraje. Es una pena que ahora, en el Monaco, no tenga la continuidad que necesita de cara a un campeonato tan importante. Pero estoy seguro de que la responsabilidad de ocupar el puesto en el Mundial no le quedará grande.

–En función de su experiencia como futbolista y entrenador, ¿estima que los jugadores que son figuras en el campeonato argentino tienen nivel como para jugar un Mundial?

–Hay que ver cada caso en particular. Lo bueno que tiene el jugador argentino es la capacidad de adaptarse con mucha rapidez a los contextos competitivos más adversos. Por ahí tenemos un defensor que pensamos que porque juega acá no va a poder marcar a Neymar, por citar un caso, pero luego la realidad nos demuestra otra cosa. De todos modos, admito que si el parámetro de análisis pasa por lo que representa el fútbol europeo, reconozco entonces que el torneo argentino está lejos de ese nivel de juego.

–¿Será el de Brasil un buen Mundial?

–Espero que sí. Hay equipos con propuestas de juego muy interesantes, ofensivas, y basadas en el buen trato de la pelota. Confío en que veamos un buen Mundial. Me entusiasma sobre todo la actualidad de algunas selecciones de Sudamérica que pueden hacer muy buenas campañas.

–¿Por qué?

–Primero porque se juega acá, en Sudamérica, y eso a los europeos les va a costar. Además de Argentina y Brasil, veo con muchas posibilidades a Colombia y a Chile, que aunque tenga un grupo muy difícil en el arranque (Holanda, España y Australia), puede ser la gran revelación si pasa la primera ronda.

–¿Y cuáles son los candidatos a quedarse con la Copa?

–Argentina y Brasil, por Sudamérica, y después Alemania y España, por Europa. No sale de ahí. Y soy optimista con respecto a la suerte de nuestro equipo: creo que esta vez, por los jugadores que tenemos, después de muchos años, podemos volver a vivir la alegría de festejar un campeonato Mundial.