Que Matías Rossi es el supremo candidato al título 2014 de Turismo Carretera no es novedad para nadie. Superó la etapa inicial de errores en la clasificación, que se extendió hasta la aguada carrera de Junín (su peor ubicación en el torneo) y terminó ganando cuatro de las once carreras de la fase regular. Pero cuidado: no abandonó nunca y la ley de las roturas podría jugarle en contra en esta etapa decisiva.

Con la mitad de victorias de Rossi, lo de Christian Ledesma fue mucho más parejito a lo largo de la fase regular. Salvo por los dos abandonos en el arranque, nunca quedó más atrás del quinto puesto. Tiene un Chivo casi tan bueno como el de Matías y la diferencia en puntos (47 a 16) no es indescontable.

Después de un arranque fogoso, que incluyó su primera victoria en TC, en termas de Río Hondo, Facundo Ardusso se desdibujó en las dos últimas carreras. La caída del acuerdo de exclusividad que tenía con Fabián Giustozzi en la provisión de los motores jugó decididamente en contra. Casi 40 puntos por detrás de Rossi, debe recuperar competitividad con su Dodge para plantear batalla.

Lo de Guillermo Ortelli ha sido bastante irregular a lo largo del año: después del triunfo en la carrera inaugural del torneo, sólo una vez más se subió al podio, y de las diez carreras en las que llegó, en cuatro lo hizo del puesto 15 al 20, sin demasiado brillo. ¿Saldrá a relucir un conjunto más concluyente en estas carreras que faltan? En San Luis disputará su carrera 300 en el TC.

Mirando los números, parece increíble que Mariano Werner haya entrado a la Copa de Oro. Aquella victoria de Concordia, bajo la lluvia, lo pone más o menos arriba en la tabla, pero ni por asomo fue el mejor Ford de la fase regular. Sin un buen motor, que no ha tenido durante el 2015, parece descartado.

El Ford más parejo, sin duda, fue el de Juan Manuel Silva, que a esta altura sabe muy bien cómo correr carreras. Varias veces rondó el podio con un auto que no es ganador. Encabeza la lista de los que están obligados a triunfar, pero no está claro si podrá hacerlo en las cinco carreras que quedan.

El eterno participante de la Copa de Oro, Jonatan Castellano, ha encontrado un rendimiento constante en las últimas carreras, en una etapa del torneo con circuitos que siempre le caen bien al Dodge. Precisa un batacazo para ser algo más que un aspirante perseverante.

En su primer año en el TC, para Nicolás Trosset ya es muy bueno haberse clasificado a la Copa de Oro. Pero es evidente que su realidad no da para más: después de resultados muy alentadores en el arranque (seis carreras consecutivos entre el 6 y el 13 lugar), la cosa se complicó mucho presupuestariamente, no pudo probar lo que necesitaba y los resultados ya no fueron los mismos.

Sus hinchas están entusiasmados con el Gurí Omar Martínez. Metió dos segundos puestos en las últimas cuatro carreras, con una vigencia inusitada. Si logra mantener, a sus 48 años, ese hambre en la fase decisiva, puede aspirar a algún resultado sorprendente. Pero pelear el título con un Ford parece tarea ímproba hasta para el entrerriano.

Juan Manuel Trucco, Leonel Pernía y Juan Marcos Angelini tuvieron tres abandonos cada uno en la fase regular, en algún momento anduvieron cerca de la punta (Pernía fue segundo en Junín en la lluvia, Angelini rompió yendo en punta en el Cabalén) y quizás en alguna carrera de la Copa estén terciando en los puestos decisivos, pero los antecedentes no suponen que vayan a ser protagonistas.

Rossi arranca la Copa de Oro con 47 puntos, Ledesma tiene 16, Ardusso, Ortelli y Werner sumaron 8, el resto arranca sin puntos. Desde ahora hablan los motores, las cajas, los chasis y las muñecas. La definición está servida.