“Tenemos que tratar de definir los partidos antes del final. Hay que mejorar muchas cosas, pero este equipo siempre es ordenado. Nos viene pasando en varios partidos que no tenemos la pelota, pero no nos desordenamos”, señaló Néstor Ortigoza, mediocampista de San Lorenzo, que recuperó la punta del torneo tras la victoria ante Boca. El jugador contó, además, cómo hizo para jugar prácticamente todo el partido con el seleccionado paraguayo el sábado, en Santiago, con derrota incluida 3-2 ante Chile, y estar en los minutos finales del clásico ante Boca: “Hablé con el que saca los pasajes en la selección y le dije que me lo cambie para cuando terminaba el partido. Que si lo tenía que pagar lo hacía sin problemas. Me dormí a las cuatro de la madrugada, pero quería jugar de arranque contra Boca porque esta clase de partidos uno siempre no se los quiere perder. En el entretiempo ya estaba para jugar”, dijo en Radio La Red.

La confianza en Ortigoza por parte de Edgardo Bauza, entrenador de San Lorenzo, es tan grande que se animó a incluirlo entre los relevos a pesar de que había llegado a la una y treinta a la concentración.

“En un momento me sentía Messi o Tevez. Me putearon hasta cuando estaba en el banco”, resaltó el jugador, quien ingresó a los 72 minutos en la Bombonera. En relación con la victoria que dejó a San Lorenzo como único líder del torneo, destacó que “Boca nos llegó dos veces nada más, nosotros tuvimos cuatro jugadas de gol claritas”.

También habló el director técnico del nuevo puntero del Torneo de Primera, que ostenta un invicto de 13 partidos y tiene la valla menos vencida con 13 goles en contra. Bauza afirmó: “El partido fue lo que imaginamos. Hicimos el 50 por ciento bien, nos defendimos muy bien, pero cuando robamos la pelota no pudimos hacer dos pases seguidos”, contó en TyC Sports. A su vez, remarcó la actuación de Barrientos, porque le simplicó la tarea al juvenil Ramiro Arias, quien reemplazó a Emmanuel Mas, convocado a la Selección. De todas formas, el volante se perderá los próximos partidos por un esguince en los ligamentos de su rodilla.

“Esto va a ser una lucha hasta el final”, añadió sobre los siete partidos que restan para completar el torneo. También palpitó el clásico que se viene ante Huracán el próximo sábado, a las 18.10, en el estadio Tomás Adolfo Ducó. “Si hay algo que tengo claro es que en los clásicos no importa cómo lleguen los equipos. Son partidos diferentes”, concluyó.