La Secretaría de Deportes de la Nación volverá a tener al frente a un ex futbolista. Según lo anunció el propio interesado, quien confesó haber recibido el llamado de Mauricio Macri y aceptado el cargo, el elegido sería el ex defensor de Boca Carlos Mac Allister, el Colorado, que en 2013 fue electo diputado nacional del PRO por la provincia de La Pampa. Néstor Kirchner también eligió futbolistas, primero a Roberto Perfumo, que pareció acomodarse en la función, y luego a Claudio Morresi. Bajo su gestión, el deporte argentino logró la llamada vuelta al oro olímpico y experimentó un crecimiento exponencial en diferentes disciplinas. A Morresi lo reemplazó el año pasado el correntino Carlos “Camau” Espínola, el máximo medallista olímpico del país y quien, a juzgar por su exitosa campaña como deportista, podía entender mejor que otros los sacrificios y necesidades del deporte olímpico.

Esa línea se cortará ahora con Mac Allister, a quien Macri conoció no bien asumió la presidencia de Boca en 1995. Durante la pretemporada de 1996 ambos tuvieron que sentarse a negociar una reducción de premios a los futbolistas del 50 por ciento. El protagonismo del Colorado, que había llegado de Argentinos en 1992 –con Boca ganó los únicos dos títulos de su carrera: Apertura 92 y Copa de Oro Nicolás Leoz, en 1993–, como vocero duro de los jugadores duró poco. Ese mismo año terminó yéndose a Racing, echado por Carlos Bilardo, quien soñaba con aquel Drean Team que le costó a Boca 20 millones de dólares y terminó siendo un fiasco.

El acercamiento actual entre Macri y Mac Allister se dio por esas cosas que tiene el marketing político. Sumar famosos, caras que los electores puedan reconocer. Claro que el ex futbolista, que terminó su carrera en Ferro en 1999, le había manifestado sus intenciones de “meterse en política”. Como diputado nacional, Mac Allister presentó tres proyectos: uno para que el Estado les otorgue una pensión a los campeones mundiales argentinos de más de 50 años; otro para imponer una versión del Himno Nacional adaptado para los encuentros internacionales; y, el más importante, un proyecto para la creación de un Fondo para el Deporte Social (Fodeso) para que el Estado se haga cargo de la cuota social que los chicos de 5 a 18, beneficiarios de la Asignación Universal por Hijo, deben pagar a los clubes para practicar deportes. Con eso le alcanzó a Mac Allister para ganarle la pulseada a Francisco Irarrázabal, actual subsecretario de Deporte de la Ciudad y uno de los impulsores de la candidatura porteña para los Juegos de la Juventud 2018. Cosas de la política.