DEPORTES
Coria no tocaría la raqueta hasta Roland Garros
Sufre un desgarro de siete milímetros en el abdominal izquierdo, y tendría para tres semanas sin pisar un court.
Por Sebastián Fest
Desde Barcelona
Una de cal y otra de arena: cada vez que da un golpe en grandes torneos, Guillermo Coria se encuentra al instante siguiente con un problema físico que frena su notable progresión en el tenis mundial. El domingo conquistó con contundencia el torneo de Montecarlo, uno de los más tradicionales y prestigiosos, pero ayer supo que puede perderse también el Abierto de Italia, y que ni siquiera defender el título de Hamburgo es algo seguro.
“Es algo jodido en serio”, dijo consternado el argentino durante una entrevista en Barcelona. “Tengo una fibra rota en el abdominal izquierdo, la misma lesión que sufrí en enero en Australia. La diferencia es que aquélla era de tres milímetros, y ésta es de siete. Estaré al menos cuatro días sin jugar, hasta el viernes no toco la raqueta”, indicó Coria.
Las lesiones persiguen al número uno argentino, que está haciendo un curso acelerado en cuanto a su físico. “Cuando me lesioné en enero, en Australia, no le di la importancia que merecía. Lo de Miami, con los cálculos renales, fue algo increíble, no es común que pase eso a mi edad. Y ahora, la verdad es que no llegué a Montecarlo con el entrenamiento suficiente”, explicó el santafesino.
Coria no quiere hacer una extrapolación directa entre los tres milímetros del desgarro de Australia y los diez días que estuvo sin jugar. Si hubiera una relación proporcional, podría estar sin pisar una cancha hasta el umbral de Roland Garros. Ayer a la mañana, ya en Barcelona, se realizó una ecografía. El resultado fue un desgarro de siete milímetros. El final de la tarde lo encontró en el consultorio de Angel Ruiz Cotorro, médico de la Federación Española de Tenis (RFET), para seguir profundizando en el tema. “Es probable que no juegue Roma, y ojalá llegue a Hamburgo, aunque ahora no lo sé. ¿Regresar a la Argentina? No lo sé, pero lo estoy pensando”, admitió.
Coria no evitó verle el lado positivo al tema: “Gracias a Dios juego mucho porque gano mucho. Por eso tengo lesiones o dolores”. Invicto sobre polvo de ladrillo en 26 partidos, su progresión parecía imparable en la temporada europea sobre arcilla. Cree –o quiere creer– que estará de vuelta pronto en el circuito, y por eso habla de su presente tenístico y de sus sueños para un Roland Garros que sólo una vez tuvo campeón argentino: Guillermo Vilas, en 1977. “Me dan como favorito en todas partes, pero estoy tranquilo, muy fuerte de cabeza, creo que ésa es la clave.” Coria sabe que es el gran candidato a conquistar Roland Garros este año, pero él prefiere hablar de los demás. “Creo que Carlos Moyá es un gran candidato, un jugador muy peligroso, como la mayoría de los españoles y los argentinos. Y David Nalbandian es un muy serio candidato.”
–¿Por encima de Coria?
–Igual que yo, igual que yo... Una final entre ambos en París sería algo fantástico.