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El fiscal federal Guillermo Montenegro comenzó a investigar ayer el pago de sobresueldos durante la presidencia de Carlos Menem y su primera medida en la causa fue tomarle declaración a Roberto Martínez Medina, quien durante el juicio oral a María Julia Alsogaray reveló que funcionarios menemistas de alto rango recibían remuneraciones adicionales en negro. Martínez Medina, ex secretario privado del ex ministro de Justicia Raúl Granillo Ocampo, brindó un largo testimonio en el que aportó datos para establecer diversas líneas de investigación y también realizó un reconocimiento de la oficina de la Jefatura de Gabinete a la que concurría mensualmente a cobrar el sobresueldo de su jefe.
La investigación del pago de sobresueldos durante el gobierno menemista fue impulsada por el abogado Ricardo Monner Sans, a partir del testimonio que Martínez Medina ofreció en el juicio a Alsogaray. El letrado consideró que los adicionales en negro no son otra cosa que “coimas” y solicitó a la Justicia la apertura de una causa por malversación de fondos públicos y fraude al Estado contra Menem, sus ministros y sus secretarios.
La causa quedó en manos del juez federal Jorge Ballestero, quien delegó su instrucción a Montenegro. La testimonial a Martínez Medina es la primera medida que el fiscal dispone en el marco de la investigación.
Montenegro convocó al ex secretario de Granillo Ocampo para que ampliara lo que el jueves pasado declaró como testigo en el juicio a Alsogaray. Allí, Martínez Medina afirmó que entre julio de 1997 y noviembre de 1999 fue todos los meses al edificio de la Jefatura de Gabinete a retirar un sobre con 50 mil pesos/dólares para el entonces ministro de Justicia. Además, reveló que su jefe no era el único que recibía un sobresueldo, sino que en ese lugar era habitual que se encontrara con otros secretarios que también iban a buscar sobres similares en nombre de Alberto Mazza, Claudia Bello y la propia ex secretaria de Recursos Naturales.
Martínez Medina declaró durante unas cinco horas ante Montenegro y el fiscal adjunto, Paul Starc. “Firmé como seis o siete hojas escritas de los dos lados”, contó el testigo a Página/12.
En su paso por Tribunales, el ex secretario privado de Granillo Ocampo no se limitó a contestar las preguntas de los fiscales: a requerimiento de Montenegro también accedió a realizar un croquis a mano alzada del lugar preciso adonde concurría mensualmente a cobrar el sobresueldo para su jefe, que quedó incorporado al expediente judicial como elemento probatorio de sus dichos.
Martínez Medina también aceptó trasladarse junto a los funcionarios judiciales hasta la misma Jefatura de Gabinete y brindar allí las precisiones que fueran necesarias. En diálogo con este diario, el ex secretario de Granillo Ocampo comentó que “si bien entraba habitualmente por Diagonal Sur y esta vez me hicieron ingresar por la cochera no tuve problemas que reconocer el lugar. Incluso, al salir de los ascensores en el noveno piso los fiscales no sabía por dónde ir y fui yo quien los guió”.
Sobre su regreso a la Jefatura de Gabinete, Martínez Medina explicó que “faltaban algunas plantas, pero todo estaba más o menos igual. En la sala de situación también han puesto algunos sillones y muebles más modernos y otra cosa que no está más es el cuadro de Menem que (Rodolfo) Aiello tenía en su despacho”.
En la época en que Martínez Medina asegura que concurría a buscar el sobresueldo de 50 mil pesos para su jefe, Aiello se desempeñaba como secretario del jefe de Gabinete, que por ese entonces era Jorge Rodríguez. Según el relato del ex secretario privado de Granillo Ocampo, era Aiello quien le decía “acá están tus cincuenta” y le entregaba el “dinero en efectivo en una carpeta marrón con elásticos negros”.
“La oficina de Aiello es la que hoy ocupa Marta Oyhanarte”, precisó Martínez Medina, quien se mostró seguro de haber aportado a los fiscales”elementos para abrir diversas líneas de investigación sobre lo que pasó en el país durante la década pasada”.