DEPORTES › RIVER Y BOCA JUEGAN ESTA NOCHE POR LOS CUARTOS DE LA COPA
Se citaron en la esquina de la semi
Ambos equipos miden los cuartos de final de la Libertadores como la posibilidad de volverse a encontrar en la semifinal si superan esta instancia. Los de Núñez reciben al resbaloso Deportivo Cali en el Monumental, mientras que el equipo de Bianchi se las verá un poco más complicado en el reducto del Sao Caetano, en el interior del estado de San Pablo.
RIVER, CON EL ENVIÓN DE LA FE
Con el envión anímico que significa vencer a Boca en la propia Bombonera, River iniciará hoy la recta final hacia ese trofeo tan anhelado: la Copa Libertadores. El líder del torneo Clausura recibirá a Deportivo Cali de Colombia, en el encuentro de ida por los cuartos de final. Precisamente, a partir de su gran actuación en el superclásico, el último domingo, el delantero Maximiliano López jugará desde el inicio ante los colombianos. López ocupará el lugar del lesionado Marcelo Salas, quien sufrió un desgarro en el isquiotibial izquierdo y permanecerá cerca de un mes inactivo.
En relación al momento que atraviesa River, el volante Marcelo Gallardo recordó ayer que en 1997 tuvo “la fortuna de ganar dos títulos a la vez, el Apertura y la Supercopa”. Y agregó: “Aquella vez conseguimos los dos torneos por tres días de diferencia y fue algo bárbaro, espectacular. Me acuerdo que la gente tenía una alegría tremenda, y no me quiero imaginar lo que podría llegar a ser si ahora ganamos la Copa y el Clausura”. De todas maneras, el capitán reconoció que “para ganar algo todavía falta mucho. Todos los partidos que vienen de ahora en más serán finales y tendremos que estar muy concentrados”.
En el mismo sentido, el ex Huracán Luis González afirmó: “Sería espectacular quedarnos con la Libertadores y con el Clausura”, y confesó que “el grupo se propuso hacer todo lo posible por ganar todo”. Además, el futbolista aclaró que “todo jugador piensa con la chance de jugar la Copa Intercontinental”.
Para el defensor Horacio Ameli, otro de los referentes del equipo, “la idea es jugar todos los partidos que vienen con la máxima concentración posible, porque así como tenemos posibilidades firmes en los dos torneos, en un descuido te podés quedar sin nada”. Y explicó: “Después del triunfo contra Boca, todos coincidimos en que todavía no ganamos nada. Recién vamos a festejar cuando demos una vuelta olímpica o las dos”.
River viene de dejar en el camino a Santos Laguna, en una polémica definición por penales, luego de perder 2-1 en los noventa minutos jugados en el estadio Monumental. Por su parte, el Deportivo Cali eliminó en octavos de final a uno de los candidatos a obtener el certamen, Cruzeiro de Brasil.
Por otro lado, el médico del plantel de River, Luis Seveso, se reunirá el próximo fin de semana con su colega del seleccionado chileno, Fernando Rádice, para definir dónde se rehabilitará el goleador Salas. Seveso mantendrá aquel encuentro debido a que el entrenador de Chile, Juvenal Olmos, pretende que Salas haga las tareas de recuperación en su país, a pesar de que no podrá jugar en los próximos dos partidos de las Eliminatorias sudamericanas, ante Venezuela y Brasil.
BOCA, BUSCANDO RECUPERARSE
Con la difícil tarea de aumentar su chance clasificatoria para las semifinales de la Copa Libertadores y con la obligación de evidenciar mejoras tras la derrota ante River, en la cual perdió la punta del torneo local, Boca visitará esta noche al Sao Caetano, el campeón del estado de San Pablo, un equipo bravo que viene de eliminar a Independiente, en el repechaje, y al América mexicano, en octavos de final, y que tiene como antecedente el haber disputado la final del torneo en 2002, ante el Olimpia. Carlos Bianchi dispondrá de sus mejores hombres, con la única variante en el mediocampo del ingreso de Javier Villarreal por Matías Donnet.
El partido, que se jugará en el estadio Anacleto Campanella, con capacidad para 30.000 espectadores, ha generado enormes expectativas en el distrito de Sao Caetano, en las afueras de San Pablo, donde el local continúa sumando seguidores, quienes se ilusionan con un triunfo ante Boca, que por su historia reciente aparece como el favorito en la serie y como candidato al título.
Carlos Bianchi no desprecia el hecho de que Sao Caetano será un rival difícil, que ya ha dado muestras de su gran personalidad y capacidad como equipo al eliminar a Independiente y al América. “Es un equipo duro, realista. Y ya dejó afuera a uno de los posibles candidatos (a los mexicanos) a ganar la Copa”, expresó Bianchi. Por eso, ante los brasileños, el técnico alineará su mayor potencial.
Si bien, tal es la costumbre del entrenador, todavía no fue confirmada la formación inicial, en principio habría sólo una duda en la zona de volantes. Por la franja derecha, el Virrey reemplazaría a Donnet con Villarreal; el resto serían los mismos que perdieron en el superclásico del último domingo el invicto como locales y la punta del torneo. “El Sao Caetano será un rival complicado, porque ya sabemos cómo es esta Copa y ellos se harán fuertes en Brasil. Pero nosotros tenemos que jugar como ante Sporting Cristal, en Perú, si pretendemos conseguir un buen resultado”, manifestó el capitán Diego Cagna.
Del lado de los brasileños, el ánimo está en alza luego de la eliminación del América, allá en el Distrito Federal, por lo que el técnico del equipo, Muricy Ramalho, ex entrenador del San Pablo, sueña con dar otro batacazo. “Mi equipo saldrá a atacar desde el comienzo, porque aquí todos quieren ver caer al actual campeón de América”, comentó Ramalho, quien agregó: “Vamos a salir a presionar, a hacer nuestro juego, y ojalá que podamos derribar esa muralla que es la defensa de Boca”.
El entrenador ya confirmó que no estará el experimentado Euller, el delantero que jugó en San Pablo, Vasco Da Gama y Palmeiras, pero sí jugarán los escurridizos Fabricio Carvalho y Warley.