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Cada vez más lejos de su nivel, Boca no pudo como local en Salta con Cerro Porteño, en el partido de ida correspondiente a los cuartos de final de la Copa Sudamericana, en el que terminó empatando. La figura del encuentro fue el arquero de Boca, Roberto Abbondanzieri, quien sobre el final de la primera parte le atajó un penal a Julio Dos Santos.
No hubo sorpresas en el rendimiento del equipo argentino. Ya desde el arranque, el equipo de Brindisi dejó en claro sus limitaciones. A la imposibilidad de jugar la pelota por abajo, de entregársela como se debe a un compañero, Boca sumó dificultades en la coordinación, en el ritmo, en la elaboración y, en forma muy notoria, sumó serios problemas defensivos.
Sin embargo, los locales tuvieron dos chances claras de gol, que llegaron a través de Cangele. En la primera, el delantero empalmó de zurda una buena habilitación de Cagna y metió el remate sobre el segundo palo del arquero Bobadilla, quien con una atajada fenomenal consiguió desviar al corner y, en la otra, recibió solo en el medio del área y metió un cabezazo sobre el palo derecho, que el arquero controló.
Del ataque de Boca, del juego, del dominio o lo que se quiera, nada más. Sólo pelotazos divididos, sin objeto y a cualquier parte. Los paraguayos, que habían manejado la pelota apenas en los primeros minutos iniciales, entendieron que el negocio estaba en aprovechar el desconcierto de Boca. En una jugada de pelota detenida, el marcador Pedro Benítez le ganó en la altura a Schiavi y metió un cabezazo cruzado ante lo que fue una salida en falso de Abbondanzieri para poner el trámite 1-0.
Boca no encontró respuestas a ese gol, aunque intentó hacerlo con algún remate desde afuera de Cascini, de floja actuación en el medio. No aparecía Cardozo y Guglielminpietro parecía estar en otro partido (¿quizás por eso lo sacó Brindisi en el complemento?); lo que intentaba Palermo, saliendo a buscar juego lejos del área, no alcanzaba.
En el primer contraataque claro de Cerro Porteño, Dos Santos quedó mano a mano con Abbondanzieri, quien terminó cometiéndole un penal. Ejecutó del volante, derechazo a la izquierda, y atajó el Pato.
Cambió el ánimo de Boca en la segunda etapa, cuando a poco de comenzar, en una jugada que nació de un saque lateral, Cascini remató desde la puerta del área con un violento zurdazo al primer palo, que significó el empate. Pudo ampliar, luego, tras un centro de Jerez que Ormazábal cabeceó por encima del travesaño. Cerro Porteño se fue metiendo atrás y Boca ganó en confianza, aunque continuó expresando dificultades en su juego.
Los dirigentes del Atlético de Madrid pretenden adquirir el 80 por ciento del pase de Carlos Tevez, pues argumentan que la situación económica del club de la capital española no les permite abonar los 20 millones de euros que solicita Boca.