DEPORTES
A Cañas lo defienden los amigos, pero en la ATP le siguen pegando
“Lo están matando”, afirmó Calleri. “Le podría haber pasado a cualquiera”, dijo Morea. “No demostró nada”, dice la ATP.
Dispares reacciones motivó la dura sanción contra Guillermo Cañas, que deberá permanecer dos años alejado de los courts. Mientras sus colegas y amigos lo defendieron, la ATP lo criticó y el presidente de la Asociación Argentina de Tenis, Enrique Morea, negó que la cuestión fuera política.
“Lo que le pasó a Cañas lo sufro como propio, me duele como si me hubiera pasado a mí –dijo ayer el cordobés Agustín Calleri–. Willy me había dicho que era optimista en que no lo iban a parar demasiado. El es un tipo sano, no puedo creer lo que le están haciendo. Lo están matando”, afirmó.
Morea manifestó su “disconformismo y su profunda tristeza” por la sanción a Cañas, pero dijo descreer que la sanción haya sido “política”, como sugirió el tenista en su descargo. “En el tenis no existen las cuestiones políticas”, afirmó. Morea dijo que lo que le sucedió a Cañas “podría haberle pasado a cualquiera” y discrepó con aquellos que aseguran que siempre le apuntan al tenis argentino en este tipo de circunstancias.
Gustavo Luza, ex capitán de Copa Davis y actual director de la Escuela Nacional de Tenis, opinó que “va a ser difícil levantar este panorama, porque la sanción es muy larga, con dos años parado le costará volver. Pero conociendo lo buen tipo que es Guillermo, y su contracción al trabajo, nos puede sorprender a todos”. Jorge Gerossi, ex entrenador de Cañas, afirmó que le daba “mucha pena. Creo en Guillermo y espero que tenga la oportunidad de revertir la situación en el Tribunal de Apelaciones”.
La ATP, en cambio, retrucó las afirmaciones de Cañas sobre la “negligencia” del organismo en el manejo de los controles antidoping. “¿Negligencia en qué? Nosotros sólo aplicamos las reglas. Cañas no consiguió demostrar ante el tribunal la negligencia del médico. Yo puedo creer la historia, pero hay que convencer al tribunal”, dijo Benito Pérez Barbadillo, vocero de la ATP. “Guillermo es un jugador muy querido por nosotros, pero la sentencia fue emitida por un tribunal independiente.”
Pero uno de los abogados de Cañas, Eduardo Ipiens Castillo, remarcó que no será la ATP la que decida el final del argentino en el tenis profesional y reiteró que confía en la apelación que presentará ante la Corte Arbitral del Deporte (CAS) en Lausana, Suiza. “Guillermo ha demostrado siempre una gran capacidad de superación y sorteará esta gran piedra que le pusieron en su camino –afirmó el letrado–. Es una desproporción sancionarlo de acuerdo a los argumentos que presentamos, aunque todo se hace siempre más difícil cuando el tribunal que lo juzgó no es independiente, ya que es retribuido por la ATP.”
“El tribunal que lo juzgó no es imparcial porque está pagado por la ATP; está pagado por el tenis en su conjunto”, dijo el vocero de la ATP, que cree que Cañas debe “entender” el funcionamiento del sistema. “Hay que respetar la sentencia”, pidió Pérez Barbadillo.