DEPORTES
La ira de Sánchez
El árbitro Angel Sánchez, furioso por no haber sido designado para dirigir el fin de semana, atacó ayer al nuevo director de la Escuela de Arbitros, Abel Gnecco, a quien acusó de dar supuestas órdenes para que algunos jugadores, entre los que se encontraría el uruguayo Paolo Montero, sean “seguidos de cerca”. “Me parece que no es una escuela, es un unipersonal. El (por Gnecco) pretende hacer árbitros temerosos. Yo no puedo callarme la boca. Los árbitros no nos sentimos protegidos”, apuntó.